EL DIARIO
Ciudad Juárez.- Janeth Rubí tiene solamente 6 años, sin embargo, frecuentemente se queja de dolores en la espalda debido a que su mochila es muy pesada. Preocupada por la situación su madre, Miriam Soto, la lleva diariamente a la escuela a fin de cargarle los diversos útiles escolares a lo largo de las cinco cuadras que deben recorrer.
“A mí también se me hace muy pesada la mochila, pero tiene que traer todos los días los libros aunque no los usa todos”, expresó momentos después de entregarle a su hija la mochila para que ingresara al salón de clases.
Indicó que la pequeña debe transportar todos los días seis libros de texto, dos cuadernos, una caja con lápices, colores, tijeras, goma para borrar y otros instrumentos, botella de agua y una cazuela pequeña donde lleva su lonche.
Comentó que lo más conveniente sería que los profesores les autoricen llevar únicamente los libros que emplearán durante el día, pues algunos textos no son requeridos a diario.
Para evitar lesiones a causa del sobrepeso de los útiles escolares, especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social recomendaron que los estudiantes porten en su mochila máximo el 10 por ciento de su peso.
Al respecto, Javier González Mocken, subsecretario local de Educación, Cultura y Deporte, comentó que actualmente se analizan varias alternativas para evitar futuras molestias físicas a los estudiantes.
Dijo que una de las opciones es que los profesores soliciten a los niños llevar únicamente el material que emplearán durante el día y, para ello, se requiere establecer horarios de clase.
Otra posibilidad es instalar ‘lockers’ metálicos principalmente en las secundarias de la ciudad para que los adolescentes puedan dejar en el salón de clases parte de sus libros de texto.
Comentó que esta herramienta se colocaría en las secundarias porque es en dicho nivel donde los alumnos requieren de mayor material escolar.
Ciudad Juárez.- Janeth Rubí tiene solamente 6 años, sin embargo, frecuentemente se queja de dolores en la espalda debido a que su mochila es muy pesada. Preocupada por la situación su madre, Miriam Soto, la lleva diariamente a la escuela a fin de cargarle los diversos útiles escolares a lo largo de las cinco cuadras que deben recorrer.
“A mí también se me hace muy pesada la mochila, pero tiene que traer todos los días los libros aunque no los usa todos”, expresó momentos después de entregarle a su hija la mochila para que ingresara al salón de clases.
Indicó que la pequeña debe transportar todos los días seis libros de texto, dos cuadernos, una caja con lápices, colores, tijeras, goma para borrar y otros instrumentos, botella de agua y una cazuela pequeña donde lleva su lonche.
Comentó que lo más conveniente sería que los profesores les autoricen llevar únicamente los libros que emplearán durante el día, pues algunos textos no son requeridos a diario.
Para evitar lesiones a causa del sobrepeso de los útiles escolares, especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social recomendaron que los estudiantes porten en su mochila máximo el 10 por ciento de su peso.
Al respecto, Javier González Mocken, subsecretario local de Educación, Cultura y Deporte, comentó que actualmente se analizan varias alternativas para evitar futuras molestias físicas a los estudiantes.
Dijo que una de las opciones es que los profesores soliciten a los niños llevar únicamente el material que emplearán durante el día y, para ello, se requiere establecer horarios de clase.
Otra posibilidad es instalar ‘lockers’ metálicos principalmente en las secundarias de la ciudad para que los adolescentes puedan dejar en el salón de clases parte de sus libros de texto.
Comentó que esta herramienta se colocaría en las secundarias porque es en dicho nivel donde los alumnos requieren de mayor material escolar.
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