Chihuahua— Cientos de militares y policías de la Federal Preventiva catearon ayer sorpresivamente el reclusorio de Aquiles Serdán donde aseguraron decenas de aparatos electrodomésticos, teléfonos celulares y armas hechizas.
Al operativo se les unieron posteriormente agentes del Cipol, quienes sólo auxiliaron a los elementos federales y militares, concluyendo la revisión casi a las cuatro de la tarde.
Los policías federales y militares arribaron al penal a temprana hora y no permitieron que los custodios que se encontraran laborando se retiraran al terminar su turno, así como tampoco los que iban a entrar se les permitió ingresar.
Entre los artículos asegurados se encuentran televisiones, refrigeradores, aparatos de aire, modulares, centros de entretenimiento, reproductores de discos, parrillas eléctricas, así como armas hechizas con “bats” de madera con puntas, cuchillos, picahielos, además de teléfonos celulares, libros satánicos, así como documentos diversos que fueron asegurados por los militares para ser analizados.
Los custodios que permanecían en el área conocida como ‘transfer’, se molestaron con los periodistas ya que no querían que tomaran imágenes de los cientos de artículos asegurados.
Las visitas al penal fueron suspendidas, causando malestar entre decenas de personas que tuvieron que regresar a la ciudad.
En el operativo fueron utilizados perros entrenados, así como un detector de armas, droga y explosivos, el cual lo llevaban los militares.
Al operativo se les unieron posteriormente agentes del Cipol, quienes sólo auxiliaron a los elementos federales y militares, concluyendo la revisión casi a las cuatro de la tarde.
Los policías federales y militares arribaron al penal a temprana hora y no permitieron que los custodios que se encontraran laborando se retiraran al terminar su turno, así como tampoco los que iban a entrar se les permitió ingresar.
Entre los artículos asegurados se encuentran televisiones, refrigeradores, aparatos de aire, modulares, centros de entretenimiento, reproductores de discos, parrillas eléctricas, así como armas hechizas con “bats” de madera con puntas, cuchillos, picahielos, además de teléfonos celulares, libros satánicos, así como documentos diversos que fueron asegurados por los militares para ser analizados.
Los custodios que permanecían en el área conocida como ‘transfer’, se molestaron con los periodistas ya que no querían que tomaran imágenes de los cientos de artículos asegurados.
Las visitas al penal fueron suspendidas, causando malestar entre decenas de personas que tuvieron que regresar a la ciudad.
En el operativo fueron utilizados perros entrenados, así como un detector de armas, droga y explosivos, el cual lo llevaban los militares.
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