EL HERALDOChihuahua, Chihuahua.- Cientos de celdas del Cereso Estatal de Juárez, hasta hace dos semanas administrado por el Municipio, eran de lujo, contaban con chapas sin acceso para los custodios, tenían paredes de tablarroca en vez de barrotes de metal y estaban equipadas con pantallas de plasma, televisiones, ventiladores y aires acondicionados.
La Fiscalía General del Estado inició un operativo para tomar el control del penal, durante el cual se han encontrado hasta la fecha armas, cocinetas, aparatos electrodomésticos y otras comodidades que los reos tenían en sus celdas, algunas amuebladas como habitaciones con todos los servicios.
La operación para controlar el penal comenzó con la transferencia formal signada por el fiscal general del Estado, Carlos Manuel Salas, y el alcalde Héctor Murguía Lardizábal el 28 de septiembre, pero hasta ayer continuaban las revisiones a fin de detectar violaciones a los reglamentos internos y a las leyes que regulan la operación de los Centros de Reinserción Social.
El 25 de julio pasado se registró una masacre de internos donde se utilizaron armas largas y cortas, además de que en las investigaciones se pudo corroborar que un día antes hubo una fiesta al interior del penal, con mujeres menores de edad, licor y drogas, por lo que se realizaron pesquisas para consignar a los responsables de los homicidios y de la introducción ilegal de personas y productos prohibidos.
Las investigaciones lograron ubicar a reos responsables, además de que fue detenido y consignado el director del penal, Lucio Cuevas Sánchez, entre otros directivos y custodios.
De forma paralela se realizaron los trámites para la trasferencia del penal municipal a la Fiscalía General del Estado, al mismo tiempo que se trasferiría el Cereso Estatal a la Secretaría de Seguridad Pública Federal, lo cual se formalizó el pasado 28 de septiembre, por lo cual los penales que operan en la frontera pasaron a manos del estado y la federación.
A raíz de esa trasferencia, el 3 de octubre fueron encontradas tres armas de fuego, una escuadra 9 milímetros, una subametralladora M11 y un fusil AK-47, así como 91 armas hechizas y 17 teléfonos celulares.
El 5 de octubre se localizaron otras 12 armas cortas y tres largas de las conocidas como "cuernos de chivo", además 500 puntas, mil cartuchos de diferentes calibres, otra subametralladora, así como dos armas de las llamadas "mata policías", por ser de un calibre especial diseñado para penetrar blindajes.
Los operativos en el Cereso de Juárez han continuado desde su trasferencia, razón por la cual durante el fin de semana se han desmantelado una cantidad aún no determinada de celdas que contaban con lujos como aparatos de aire frío y caliente, ventiladores, sillones, colchones, cocinetas, alacenas, hornos de microondas, reproductores de música, televisores y pantallas de plasma, entre otras comodidades prohibidas en prisión.
La Fiscalía General del Estado dio a conocer imágenes del acondicionamiento de celdas, así como del mobiliario de grandes dimensiones y otras adecuaciones también prohibidas en las normas.
Algunas celdas, informó la FGE sin especificar cantidades, tenían piso de cerámica, techos de plafón igual que las paredes, adornos de todo tipo y sin vista al exterior, es decir que los barrotes de metal estaban cubiertos como su fueran una pared más, por lo que los reos no estaban a la vista de los celadores.
Además las puertas de acceso a las celdas tenían chapas y cerraduras puestas por los propios internos, de manera que no podían ser abiertas por los custodios, eran de acceso restringido hasta para las propias autoridades.
"Lo que se busca con los operativos es igualar las condiciones de todo el penal, para adaptarlo a los reglamentos y que todos los reos tengan las mismas condiciones en la prisión", afirmó una fuente de la Fiscalía del Estado, a cargo de los operativos de revisión en el ahora Cereso Estatal.
Contrario a las celdas de lujo, se encontraron otras en condiciones insalubres, donde se encontraban hacinados otros reos, razón por la que deberán ser remodeladas a fin de que todos los encuentros se encuentren en situaciones similares.
A fin de que el penal opere en condiciones favorables, fue creado un Consejo Interdisciplinario Estatal que se encargará de la vigilancia permanente para el cumplimiento de las normas, habituales en todo el sistema penitenciario nacional.
Será hasta dentro de unos días que se den a conocer con precisión las cifras de decomisos de artículos prohibidos, así como los resultados para tomar el control de la cárcel.
La Fiscalía General del Estado inició un operativo para tomar el control del penal, durante el cual se han encontrado hasta la fecha armas, cocinetas, aparatos electrodomésticos y otras comodidades que los reos tenían en sus celdas, algunas amuebladas como habitaciones con todos los servicios.
La operación para controlar el penal comenzó con la transferencia formal signada por el fiscal general del Estado, Carlos Manuel Salas, y el alcalde Héctor Murguía Lardizábal el 28 de septiembre, pero hasta ayer continuaban las revisiones a fin de detectar violaciones a los reglamentos internos y a las leyes que regulan la operación de los Centros de Reinserción Social.
El 25 de julio pasado se registró una masacre de internos donde se utilizaron armas largas y cortas, además de que en las investigaciones se pudo corroborar que un día antes hubo una fiesta al interior del penal, con mujeres menores de edad, licor y drogas, por lo que se realizaron pesquisas para consignar a los responsables de los homicidios y de la introducción ilegal de personas y productos prohibidos.
Las investigaciones lograron ubicar a reos responsables, además de que fue detenido y consignado el director del penal, Lucio Cuevas Sánchez, entre otros directivos y custodios.
De forma paralela se realizaron los trámites para la trasferencia del penal municipal a la Fiscalía General del Estado, al mismo tiempo que se trasferiría el Cereso Estatal a la Secretaría de Seguridad Pública Federal, lo cual se formalizó el pasado 28 de septiembre, por lo cual los penales que operan en la frontera pasaron a manos del estado y la federación.
A raíz de esa trasferencia, el 3 de octubre fueron encontradas tres armas de fuego, una escuadra 9 milímetros, una subametralladora M11 y un fusil AK-47, así como 91 armas hechizas y 17 teléfonos celulares.
El 5 de octubre se localizaron otras 12 armas cortas y tres largas de las conocidas como "cuernos de chivo", además 500 puntas, mil cartuchos de diferentes calibres, otra subametralladora, así como dos armas de las llamadas "mata policías", por ser de un calibre especial diseñado para penetrar blindajes.
Los operativos en el Cereso de Juárez han continuado desde su trasferencia, razón por la cual durante el fin de semana se han desmantelado una cantidad aún no determinada de celdas que contaban con lujos como aparatos de aire frío y caliente, ventiladores, sillones, colchones, cocinetas, alacenas, hornos de microondas, reproductores de música, televisores y pantallas de plasma, entre otras comodidades prohibidas en prisión.
La Fiscalía General del Estado dio a conocer imágenes del acondicionamiento de celdas, así como del mobiliario de grandes dimensiones y otras adecuaciones también prohibidas en las normas.
Algunas celdas, informó la FGE sin especificar cantidades, tenían piso de cerámica, techos de plafón igual que las paredes, adornos de todo tipo y sin vista al exterior, es decir que los barrotes de metal estaban cubiertos como su fueran una pared más, por lo que los reos no estaban a la vista de los celadores.
Además las puertas de acceso a las celdas tenían chapas y cerraduras puestas por los propios internos, de manera que no podían ser abiertas por los custodios, eran de acceso restringido hasta para las propias autoridades.
"Lo que se busca con los operativos es igualar las condiciones de todo el penal, para adaptarlo a los reglamentos y que todos los reos tengan las mismas condiciones en la prisión", afirmó una fuente de la Fiscalía del Estado, a cargo de los operativos de revisión en el ahora Cereso Estatal.
Contrario a las celdas de lujo, se encontraron otras en condiciones insalubres, donde se encontraban hacinados otros reos, razón por la que deberán ser remodeladas a fin de que todos los encuentros se encuentren en situaciones similares.
A fin de que el penal opere en condiciones favorables, fue creado un Consejo Interdisciplinario Estatal que se encargará de la vigilancia permanente para el cumplimiento de las normas, habituales en todo el sistema penitenciario nacional.
Será hasta dentro de unos días que se den a conocer con precisión las cifras de decomisos de artículos prohibidos, así como los resultados para tomar el control de la cárcel.
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