Por un lapso de un mes, 870 habitantes de las comunidades rurales, tuvieron la oportunidad de emplearse temporalmente debido a un programa emergente realizado por el Municipio para lo que se destinaron 2 millones de pesos adicionales al presupuesto anual.
En próximos días está por pagarse la última quincena del programa para dar conclusión al mismo, cuyas actividades consistieron en limpieza de carreteras, de desmontes, desbordes de arroyos, pintura o encalado de escuelas y espacios públicos. Así como la colocación de pinos pequeños en lugares como El Charco.
Fueron alrededor de 38 las comunidades que participaron de manera temporal para lo cual se creó igual número de comités, representados por un presidente, secretario y tesorero, que fueron asesorados por las autoridades para ver los jornales de las personas y las maneras de pago del dinero.
Debido a la sequía que azotó el estado, los agricultores y ganaderos registraron cuantiosas pérdidas, ya que murieron aproximadamente 990 cabezas de ganado y 14 mil 500 hectáreas agrícolas se perdieron, ya que varias se dejaron sembrar y de otras no se levantará cosecha, por ello se tomó la decisión de poner en marcha el 5 de noviembre pasado este programa emergente.
El pago que recibieron los casi 900 beneficiarios fue de un jornal, que equivale a dos horas de trabajo y se determina en 56 pesos, por lo que se trabajó alrededor de dos jornales diarios por persona por lo que el pago quedó en 112 pesos al día.
En próximos días está por pagarse la última quincena del programa para dar conclusión al mismo, cuyas actividades consistieron en limpieza de carreteras, de desmontes, desbordes de arroyos, pintura o encalado de escuelas y espacios públicos. Así como la colocación de pinos pequeños en lugares como El Charco.
Fueron alrededor de 38 las comunidades que participaron de manera temporal para lo cual se creó igual número de comités, representados por un presidente, secretario y tesorero, que fueron asesorados por las autoridades para ver los jornales de las personas y las maneras de pago del dinero.
Debido a la sequía que azotó el estado, los agricultores y ganaderos registraron cuantiosas pérdidas, ya que murieron aproximadamente 990 cabezas de ganado y 14 mil 500 hectáreas agrícolas se perdieron, ya que varias se dejaron sembrar y de otras no se levantará cosecha, por ello se tomó la decisión de poner en marcha el 5 de noviembre pasado este programa emergente.
El pago que recibieron los casi 900 beneficiarios fue de un jornal, que equivale a dos horas de trabajo y se determina en 56 pesos, por lo que se trabajó alrededor de dos jornales diarios por persona por lo que el pago quedó en 112 pesos al día.
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