Chihuahua— Los Centros de Reinserción Social del estado, llamados también Ceresos, carecen de un sistema para inhibir la entrada y salida de llamadas de teléfono celular, según lo reconoció el fiscal general del estado, Carlos Manuel Salas, así como el titular de la Fiscalía Especializada en Ejecución de Penas y Medidas Judiciales, Eduardo Guerrero Durán.
Será hasta enero cuando se inicie la instalación de sistemas para bloquear la señal de celular, pero sólo en el penal de Aquiles Serdán, en la capital del estado, y posteriormente continuarán los demás centros penitenciarios, según lo informó Jorge Chairez, vocero de la Fiscalía.
En plena conferencia de prensa celebrada en el interior del penal de Aquiles Serdán, varios periodistas recibieron llamadas a su aparato celular y éstas pudieron ser perfectamente contestadas. De igual manera, otros hicieron llamadas desde el interior y no hubo ninguna interferencia que impidiera la salida de la señal.
Cuestionado al respecto, el director de la Fiscalía Especializada en Ejecución de Penas y Medidas Judiciales, Eduardo Guerrero Durán, reveló que aún no se cuenta con un sistema de inhibición de telefonía celular en ese penal, pero que a principios de año ya se cubrirá esa carencia.
En presencia del fiscal Salas, el encargado de todo el sistema penitenciario de la entidad reconoció esa falta de inhibidores, e informó que en enero próximo les llegará un equipo especializado, importado de Colombia, con el cual podrán detener las señales de telefonía.
Así mismo, informó que en los diversos operativos de seguridad que han llevado a cabo durante la actual administración, se han decomisado más de 700 aparatos celulares y se lograron desarticular bandas completas de extorsionadores que operaban en el interior de ese penal.
No obstante, el fiscal Salas aseguró que los Ceresos ya están bajo el control del estado.
“Hace un año, aquí había gente armada, se cobraban cuotas por las sillas, por las visitas, por la comida, por ir al médico, por medicinas, por transitar… había de todo, se ha hecho un esfuerzo grande para recuperar el orden”, afirmó el fiscal.
Agregó que desde el inicio de la administración se han decomisado 146 armas, de las cuales 52 eran largas y 82 armas hechizas.
Respecto al riesgo en que se encuentra la población por la carencia de esos sistemas de inhibición de señales, Guerrero Durán dijo que ya se han desarticulado las bandas dedicadas a la extorsión que operaban desde los penales del estado, y que muchos de los líderes de ya se encuentran recluidos en los Ceferesos del país.
Será hasta enero cuando se inicie la instalación de sistemas para bloquear la señal de celular, pero sólo en el penal de Aquiles Serdán, en la capital del estado, y posteriormente continuarán los demás centros penitenciarios, según lo informó Jorge Chairez, vocero de la Fiscalía.
En plena conferencia de prensa celebrada en el interior del penal de Aquiles Serdán, varios periodistas recibieron llamadas a su aparato celular y éstas pudieron ser perfectamente contestadas. De igual manera, otros hicieron llamadas desde el interior y no hubo ninguna interferencia que impidiera la salida de la señal.
Cuestionado al respecto, el director de la Fiscalía Especializada en Ejecución de Penas y Medidas Judiciales, Eduardo Guerrero Durán, reveló que aún no se cuenta con un sistema de inhibición de telefonía celular en ese penal, pero que a principios de año ya se cubrirá esa carencia.
En presencia del fiscal Salas, el encargado de todo el sistema penitenciario de la entidad reconoció esa falta de inhibidores, e informó que en enero próximo les llegará un equipo especializado, importado de Colombia, con el cual podrán detener las señales de telefonía.
Así mismo, informó que en los diversos operativos de seguridad que han llevado a cabo durante la actual administración, se han decomisado más de 700 aparatos celulares y se lograron desarticular bandas completas de extorsionadores que operaban en el interior de ese penal.
No obstante, el fiscal Salas aseguró que los Ceresos ya están bajo el control del estado.
“Hace un año, aquí había gente armada, se cobraban cuotas por las sillas, por las visitas, por la comida, por ir al médico, por medicinas, por transitar… había de todo, se ha hecho un esfuerzo grande para recuperar el orden”, afirmó el fiscal.
Agregó que desde el inicio de la administración se han decomisado 146 armas, de las cuales 52 eran largas y 82 armas hechizas.
Respecto al riesgo en que se encuentra la población por la carencia de esos sistemas de inhibición de señales, Guerrero Durán dijo que ya se han desarticulado las bandas dedicadas a la extorsión que operaban desde los penales del estado, y que muchos de los líderes de ya se encuentran recluidos en los Ceferesos del país.
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