viernes, 11 de noviembre de 2011

Cobra monóxido primera víctima de la temporada

DIARIO.COM


El primer deceso por monóxido de carbono de la temporada se registró ayer en un domicilio de la colonia Margaritas.

Los hechos ocurrieron a las 6 de la mañana luego de que familiares de un hombre de 52 años acudieran a buscarlo a la casa número 1168 de la calle Gregorio M. Solís, casi esquina con Cholula.

Al no salir a abrir la puerta los parientes de la víctima, identificada como Jorge Alberto Yu King, optaron por entrar y lo localizaron inconsciente sobre la cama.

Debido a ello llamaron a una ambulancia para que lo trasladara al área de Urgencias del Hospital General de Zona 6 del Seguro Social, donde finalmente fue declarado sin vida.

Ante esta situación, autoridades urgieron a la ciudadanía a estar alertas y reiteraron el llamado a cumplir las indicaciones sobre el uso y manejo adecuado de los calentones.

De acuerdo con un reporte oficial emitido por el Departamento de Bomberos del 2001 al 2010, el año que presentó más víctimas mortales y lesionados fue el 2002, cuando hubo 372 intoxicados y 24 muertes por inhalación del monóxido de carbono.

La estadística refiere que en esa década fueron mil 980 lesionados y 103 muertos. De ese decenio, el 2010 fue el que menos incidencia de mortalidad e intoxicaciones presentó, con 29 lesionados y un fallecido.

Los datos indican que en el 2001 hubo 313 afectados por la inhalación del gas carbónico y 21 muertes; para el 2002 se registraron 372 lesionados y 24 decesos; en el 2003, 139 intoxicados y 14 fatalidades; al año siguiente fueron 293 lesionados y 12 muertos; en el 2005, 174 con lesiones y cinco fallecidos; y en el 2006 hubo 122 intoxicaciones y 11 personas que perdieron la vida.

Para el 2007 se incrementaron los lesionados al alcanzar los 259, pero disminuyeron los fallecidos con 8; al año siguiente la cifra fue a la baja con 146 intoxicados y tres muertos; en el 2009 se presentaron 133 lesionados y cuatro decesos, y finalmente en el 2010 fueron 29 afectados por el monóxido y una muerte.

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