El Heraldo
Chihuahua, Chihuahua.- La restauración de edificios históricos es una ciencia que se ha desarrollado desde hace 150 años, pero es después de la II Guerra Mundial cuando cobra el relevante papel que tiene actualmente.En nuestra ciudad de Chihuahua se han realizado trabajos de restauración desde hace cuarenta años.
El arquitecto Felipe Siqueiros Prieto (+) fue de los pioneros cuando se derrumbó la viguería del templo de Santa Rita un lluvioso mes de septiembre.
Después, otras edificaciones como el Centro Cultural Chihuahua, las oficinas del señor Jaime Creel, donde participaron los arquitectos Valdez T.G.; la Quinta Gameros, con el arquitecto Siqueiros, cuando se acomodaron los muebles Requena y después el arquitecto Eduardo Nava realizó trabajos importantes.
La Catedral ha sido objeto de dos grandes intervenciones con fines de restauración. A mediados de los 70 con el arquitecto Siqueiros, a través de la Comisión de Orden y Decoro de la Catedral, fundada por ilustres personalidades, cuyo interés por la cultura chihuahuense ha estado siempre presente.
Una segunda intervención a fines de los 80 y ahora, que se inicia la tercera intervención.Existen documentos internacionales [International Charter for the Conservation and Restoration of Monuments and Sites (The Venice Charter) -conocida como Carta de Venecia (1964), otros más recientes como ICOMOS Charter -principles for the analysis, conservation and structural restoration of architectural heritage- (2003)], que establecen los lineamientos de cómo hacer una intervención.
Aquí en nuestro país existen organismos como el Instituto Nacional de Antropología e Historia, que es el encargado de vigilar el correcto mantenimiento de los edificios históricos.Una labor de restauración es un trabajo discreto que pasa desapercibido, pues no debe rejuvenecer al edificio. Los vestigios antiguos se conservan y el aspecto del edificio se mantiene igual.
La restauración tiene el objeto de que el edificio se mantenga en uso y en buenas condiciones estructurales para que de forma integra se transmita a las generaciones venideras.
La Catedral ha estado en Chihuahua por más de 250 años y así seguirá por otros 250 años. En ese entonces habrá avances técnicos que permitirán que se conserve de forma muy prolongada en el tiempo.
La Arquidiócesis ha propuesto realizar los trabajos, encabeza la iniciativa el arzobispo don José Fernández Arteaga, con motivo de celebrarse el quincuagésimo aniversario de la Provincia de Chihuahua.
El patrocinio de los trabajos se fondea gracias a los apoyos del Gobierno municipal, del Gobierno del Estado y la aportación generosa de la comunidad cristiana. Va el agradecimiento por su ayuda para cumplir con esta importante responsabilidad.
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