Tania M. Moreno
CIUDAD DE MÉXICO — La capacitación es una herramienta que ayuda a las empresas a salir de la crisis, ya que explota las capacidades de los empleados e incentiva la búsqueda de respuestas creativas para afrontar problemas, asegura en entrevista el experto del ICAMI, Ernesto Uranga.
No obstante la importancia de formar empleados productivos, el 51% de las empresas piensa eliminar costos fijos prescindibles, incluyendo la capacitación, para sobrellevar la turbulencia financiera, según un estudio de Deloitte a 125 ejecutivos de Pymes y grandes empresas.
"Es necesario que una empresa dé capacitación, porque garantiza que se alineen procesos y tengan buenos niveles de eficiencia. Hace a las personas productivas, el riesgo de no hacerlo, es probar con situaciones improvisadas", dice el catedrático de la institución dedicada a la formación y desarrollo de gerentes.
Manos a la obra
El dinero es la principal causa por la que los planes de capacitación se ignoran o eliminan. Y aunque es importante ahorrar en todos los rubros posible, hacerlo en este proceso "es un error, a la larga es más caro corregir procesos deficientes que pudieron evitarse con una buena formación laboral", señala el consultor empresarial y especialista de la Universidad Autónoma de México (UAM), Carlos Avellaneda.
Para alinear los procesos con el presupuesto de la empresa, los expertos recomiendan:
Hacer un diagnóstico correcto de las competencias necesarias a desarrollar desde el nivel organizacional más alto, hasta el nivel operativo.
Un nuevo plan de actividades ajustadas a ese diagnóstico.
La ejecución rigurosa de ese plan.
Una evaluación periódica de resultados, que nos permita reajustar el plan en forma eficiente.
Una vez hecho esto, se pueden encontrar estrategias simples que impulsen la colaboración de los empleados y mejoren el clima organizacional.
Por ejemplo, si trabajas en una Pyme, lo más seguro es que exista relación directa con el jefe, que en la mayoría de los casos es el fundador de la organización. En este punto lo más importante es ser coherente entre lo que se comunica y lo que se hace: "no puedes decir que va a haber un recorte de personal por falta de fondos y al mismo tiempo estrenar un carro. Eso corta la confianza y por ende la colaboración entre el dueño y los trabajadores", dice Uranga.
Enseña a los empleados a usar su libertad. En la medida en la que se forme a la gente para que aprenda a tomar decisiones sin presiones, pero alineadas con la empresa, se formarán personas capaces de sortear crisis y adelantarse a los acontecimientos, es decir, gente con reacción inmediata y preparada para no ser sorprendida ante eventualidades. "Es importante que cada empleado tenga claro qué le corresponde hacer en su trabajo, parece una obviedad, pero muchos no tienen clara cuál es su posición en la compañía y menos qué se espera de ellos", asegura el consultor Helios Herrera.
Al capacitar no debe ignorarse al conjunto de la plantilla laboral, vale la pena crear un programa especial para elementos clave, pero toda la organización debe estar involucrada. A decir de Avellaneda hay que hacer hincapié en poner a un empleado en los zapatos del otro, para que se involucre en todo el desarrollo. "Limitarse sólo a su área es una forma de organización responde a lo que era la empresa hace tiempo, cuando el puesto era eterno", asegura. Ya no es así, en la medida en que evoluciona la competitividad de la organización no te puedes quedar en los límites de un puesto, se debe trascender, de ahí la formación, que da una capacidad de visión productiva en escenarios o entornos inestables.
Capacitación cruzada. Esta es una nueva modalidad en la que los empleados intercambian puestos de trabajo que tienen poca o nula relación con el suyo. Su objetivo es justo darle herramientas para manejar diferentes áreas de la organización, pensando en la viabilidad de futuros cambios o simplemente que el personal conozca todos los proceso productivos de la empresa: "nunca se sabe de dónde pueden venir las mejores soluciones a los problemas, sucede que incluso llegan de áreas diferentes", dice el director general de Bumeran.com, Mateo Cuadras. Otra ventaja, es que ayuda a reemplazos temporales a causa de bajas, suspensiones o enfermedad.
Capacitación en línea. Las nuevas tecnologías permiten que esta actividad se lleve a cabo a través de canales diferentes al presencial en una aula. Portales como Herramientas Pyme ofrecen capacitación gratuita en diferentes rubros. También algunas páginas de gobierno dan asesoría y cursos en línea gratuitos para las Pymes. Además una búsqueda en Internet nos puede arrojar sitios con manuales, tutoriales o cursos gratuitos online que incluso pueden personalizarse.
No obstante la importancia de formar empleados productivos, el 51% de las empresas piensa eliminar costos fijos prescindibles, incluyendo la capacitación, para sobrellevar la turbulencia financiera, según un estudio de Deloitte a 125 ejecutivos de Pymes y grandes empresas.
"Es necesario que una empresa dé capacitación, porque garantiza que se alineen procesos y tengan buenos niveles de eficiencia. Hace a las personas productivas, el riesgo de no hacerlo, es probar con situaciones improvisadas", dice el catedrático de la institución dedicada a la formación y desarrollo de gerentes.
Manos a la obra
El dinero es la principal causa por la que los planes de capacitación se ignoran o eliminan. Y aunque es importante ahorrar en todos los rubros posible, hacerlo en este proceso "es un error, a la larga es más caro corregir procesos deficientes que pudieron evitarse con una buena formación laboral", señala el consultor empresarial y especialista de la Universidad Autónoma de México (UAM), Carlos Avellaneda.
Para alinear los procesos con el presupuesto de la empresa, los expertos recomiendan:
Hacer un diagnóstico correcto de las competencias necesarias a desarrollar desde el nivel organizacional más alto, hasta el nivel operativo.
Un nuevo plan de actividades ajustadas a ese diagnóstico.
La ejecución rigurosa de ese plan.
Una evaluación periódica de resultados, que nos permita reajustar el plan en forma eficiente.
Una vez hecho esto, se pueden encontrar estrategias simples que impulsen la colaboración de los empleados y mejoren el clima organizacional.
Por ejemplo, si trabajas en una Pyme, lo más seguro es que exista relación directa con el jefe, que en la mayoría de los casos es el fundador de la organización. En este punto lo más importante es ser coherente entre lo que se comunica y lo que se hace: "no puedes decir que va a haber un recorte de personal por falta de fondos y al mismo tiempo estrenar un carro. Eso corta la confianza y por ende la colaboración entre el dueño y los trabajadores", dice Uranga.
Enseña a los empleados a usar su libertad. En la medida en la que se forme a la gente para que aprenda a tomar decisiones sin presiones, pero alineadas con la empresa, se formarán personas capaces de sortear crisis y adelantarse a los acontecimientos, es decir, gente con reacción inmediata y preparada para no ser sorprendida ante eventualidades. "Es importante que cada empleado tenga claro qué le corresponde hacer en su trabajo, parece una obviedad, pero muchos no tienen clara cuál es su posición en la compañía y menos qué se espera de ellos", asegura el consultor Helios Herrera.
Al capacitar no debe ignorarse al conjunto de la plantilla laboral, vale la pena crear un programa especial para elementos clave, pero toda la organización debe estar involucrada. A decir de Avellaneda hay que hacer hincapié en poner a un empleado en los zapatos del otro, para que se involucre en todo el desarrollo. "Limitarse sólo a su área es una forma de organización responde a lo que era la empresa hace tiempo, cuando el puesto era eterno", asegura. Ya no es así, en la medida en que evoluciona la competitividad de la organización no te puedes quedar en los límites de un puesto, se debe trascender, de ahí la formación, que da una capacidad de visión productiva en escenarios o entornos inestables.
Capacitación cruzada. Esta es una nueva modalidad en la que los empleados intercambian puestos de trabajo que tienen poca o nula relación con el suyo. Su objetivo es justo darle herramientas para manejar diferentes áreas de la organización, pensando en la viabilidad de futuros cambios o simplemente que el personal conozca todos los proceso productivos de la empresa: "nunca se sabe de dónde pueden venir las mejores soluciones a los problemas, sucede que incluso llegan de áreas diferentes", dice el director general de Bumeran.com, Mateo Cuadras. Otra ventaja, es que ayuda a reemplazos temporales a causa de bajas, suspensiones o enfermedad.
Capacitación en línea. Las nuevas tecnologías permiten que esta actividad se lleve a cabo a través de canales diferentes al presencial en una aula. Portales como Herramientas Pyme ofrecen capacitación gratuita en diferentes rubros. También algunas páginas de gobierno dan asesoría y cursos en línea gratuitos para las Pymes. Además una búsqueda en Internet nos puede arrojar sitios con manuales, tutoriales o cursos gratuitos online que incluso pueden personalizarse.
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