El Heraldo
Chihuahua, Chihuahua.- Veagentes de la Policía estatal reprobaron los exámenes federales de confianza, por lo que están suspendidos de sus cargos y se encuentran en investigación para precisar el por qué no acreditaron la prueba de polígrafo o detector de mentiras.
El proceso de reevaluación es con el fin de despejar inconsistencias en los resultados, por lo que de ratificarse las conclusiones serán dados de baja definitiva y podrían enfrentar procesos jurídicos.Lo anterior fue informado ayer por el director del Cuerpo de Inteligencia Policial, Saúl Hernández, quien dijo "ya tenemos los exámenes de confianza de los elementos de la Cipol, ahorita están en investigación veinte elementos".
Los exámenes de confiabilidad fueron aplicados a 260 policías preventivos de los cuales veinte no acreditaron la prueba del detector de mentiras, lo que los llevó a ser suspendidos provisionalmente de su cargo para ser evaluados por segunda ocasión.
"Nosotros estamos haciendo el trabajo que nos corresponde, que es un trabajo conjunto entre la aplicación de los exámenes y la evaluación de las policías estatales y municipales; en unos días estaremos en condiciones de definir quiénes son los elementos que salen de la corporación", informó al respecto Saúl Hernández. De acuerdo con la información de la Secretaría de Seguridad Pública Estatal (SSPE) existen ciertas "inconsistencias" en los resultados del polígrafo, a lo que se le catalogó como aspectos subjetivos.
Se explicó que debido a que la Federación recomienda la reevaluación en quellos policías que no acreditaron totalmente las distintas pruebas; la dependencia estatal cesó de sus funciones a dicho número de agentes e inició la aplicación de la prueba del polígrafo, misma que no fue aprobada por los presuntos malos elementos.
"Durante la prueba es normal que los sometidos tengan diversos estímulos al momento de ser cuestionados, pero ello no precisa que hayan cometido, hasta ese momento, alguna irregularidad en sus funciones", dijo la unidad de información de la SSPE.Además se informó que pronto se tendrán los resultados de las nuevas pruebas y que es cuestión de días para saber si existen elementos suficientes para cesar de sus funciones a algún policía estatal.
En caso de ser despedidos de la dependencia estatal, los malos agentes son investigados para conocer sus actividades durante su desempeño público, por lo que de encontrarse alguna relación con la delincuencia, podrían enfrentar un proceso penal.Los veinte agentes reprobados se suman a la lista de 400 policías de Ciudad JJuárez y 96 elementos de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) que resultaron "no recomendables" por la Secretaria de Seguridad Pública Federal durante el 2008.
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