Chihuahua— En el marco de la sesión extraordinaria del Consejo Estatal del PAN en Chihuahua, realizada ayer en esta ciudad capital, en donde la dirigencia rindió un informe de actividades, un grupo de panistas planteó la necesidad de la renuncia de Cruz Pérez Cuéllar al frente del Comité Directivo Estatal (CDE).
Lo anterior fue por considerar que es responsable directo de la derrota sufrida el pasado 5 de julio en la entidad, en donde Acción Nacional tan sólo pudo lograr el triunfo en el Distrito 03, apenas con 400 votos de diferencia; así como del famoso “batopilazo”, cometido en la elección interna de candidatos a diputados federales por la vía plurinominal.
Al respecto, el líder del panismo en la entidad puntualizó que no es hombre de renuncias y que en todo caso, sugirió, que los “interesados” presenten esa solicitud ante los organismos correspondientes.
“La renuncia la tienen que tramitar por la vía institucional. Yo no soy de los que tienen como característica personal renunciar. No es una situación que vaya con mi formación política, ni familiar. En lo personal, creo que los retos deben de asumirse a plenitud”, enfatizó.
Pérez Cuéllar agregó que el Consejo Estatal del PAN en estos momentos se debe de concentrar en analizar “los retos que tenemos por delante, que son primero, empezar a discutir para qué queremos el voto en el 2010. Tenemos que definir qué le vamos a ofrecer a los chihuahuenses que sea diferente al PRI, en materia de seguridad, de desarrollo económico, de salud y otros temas prioritarios. Otro reto que debemos discutir es cómo vamos a procesar la elección de nuestros candidatos, no necesariamente mi renuncia”.
Pero, dijo, “seré respetuoso de las personas que consideran que es necesario que debo de dejar el cargo”.
En esa sesión extraordinaria, el diputado juarense Andrés de Anda manifestó a cada uno de los consejeros, por escrito, que “el fantasma de Germán Martínez y su sucesión, así como el ambiente del panismo nacional, inmerso en un ánimo de encontrar responsables de la derrota del 5 de julio, pondrá sobre la mesa el tena de la renovación de la dirigencia estatal”.
El legislador local hizo hincapié en que “en el caso de Chihuahua, la permanente defensa que el dirigente estatal hiciera de un candidato del PRI, cuestionado por corrupción y sus conocidos nexos con el narcotráfico, o su silencio frente al PRI y al Gobernador, o el fraude perpetrado por la dirigencia en el proceso de selección de candidatos a diputados por la vía plurinonominal, o la promoción desde la dirigencia de candidaturas y la falta de imparcialidad en quien debía garantizarla, constituyen graves responsabilidades que debe de encarar, y en la opinión de quien suscribe, así como de una gran cantidad de panistas, la necesaria reconstrucción del partido pasa no sólo por la renovación de la dirigencia, sin o del CDE”.
Asimismo, cuestionó lo siguiente: “¿Cómo puede el PAN unir a una comunidad, si en su seno continua instalada una visión facciosa que alienta el encono, el linchamiento y la exclusión?, ¿cómo puede el PAN aspirar y encarnar los sueños de los chihuahuenses, si su vida interna continúa marcada por la mezquindad y es incapaz de inspirar a su propia militancia?, ¿cómo puede ofrecer honestidad, si continúa callado frente a la lacerante corrupción que impera en el estado”...
Por su parte, el diputado Arturo Zubía Fernández señaló que “tenemos que analizar cómo se debe de cambiar al partido. Si hay grupos, si hay gentes que estén interrumpiendo el proceso normal del PAN, creo que sí se deben de ir”.
“En estos momentos lo sano para el PAN es que la dirigencia reencauce el camino, que emprenda una nueva travesía y que regrese a sus principios”, añadió.
Lo anterior fue por considerar que es responsable directo de la derrota sufrida el pasado 5 de julio en la entidad, en donde Acción Nacional tan sólo pudo lograr el triunfo en el Distrito 03, apenas con 400 votos de diferencia; así como del famoso “batopilazo”, cometido en la elección interna de candidatos a diputados federales por la vía plurinominal.
Al respecto, el líder del panismo en la entidad puntualizó que no es hombre de renuncias y que en todo caso, sugirió, que los “interesados” presenten esa solicitud ante los organismos correspondientes.
“La renuncia la tienen que tramitar por la vía institucional. Yo no soy de los que tienen como característica personal renunciar. No es una situación que vaya con mi formación política, ni familiar. En lo personal, creo que los retos deben de asumirse a plenitud”, enfatizó.
Pérez Cuéllar agregó que el Consejo Estatal del PAN en estos momentos se debe de concentrar en analizar “los retos que tenemos por delante, que son primero, empezar a discutir para qué queremos el voto en el 2010. Tenemos que definir qué le vamos a ofrecer a los chihuahuenses que sea diferente al PRI, en materia de seguridad, de desarrollo económico, de salud y otros temas prioritarios. Otro reto que debemos discutir es cómo vamos a procesar la elección de nuestros candidatos, no necesariamente mi renuncia”.
Pero, dijo, “seré respetuoso de las personas que consideran que es necesario que debo de dejar el cargo”.
En esa sesión extraordinaria, el diputado juarense Andrés de Anda manifestó a cada uno de los consejeros, por escrito, que “el fantasma de Germán Martínez y su sucesión, así como el ambiente del panismo nacional, inmerso en un ánimo de encontrar responsables de la derrota del 5 de julio, pondrá sobre la mesa el tena de la renovación de la dirigencia estatal”.
El legislador local hizo hincapié en que “en el caso de Chihuahua, la permanente defensa que el dirigente estatal hiciera de un candidato del PRI, cuestionado por corrupción y sus conocidos nexos con el narcotráfico, o su silencio frente al PRI y al Gobernador, o el fraude perpetrado por la dirigencia en el proceso de selección de candidatos a diputados por la vía plurinonominal, o la promoción desde la dirigencia de candidaturas y la falta de imparcialidad en quien debía garantizarla, constituyen graves responsabilidades que debe de encarar, y en la opinión de quien suscribe, así como de una gran cantidad de panistas, la necesaria reconstrucción del partido pasa no sólo por la renovación de la dirigencia, sin o del CDE”.
Asimismo, cuestionó lo siguiente: “¿Cómo puede el PAN unir a una comunidad, si en su seno continua instalada una visión facciosa que alienta el encono, el linchamiento y la exclusión?, ¿cómo puede el PAN aspirar y encarnar los sueños de los chihuahuenses, si su vida interna continúa marcada por la mezquindad y es incapaz de inspirar a su propia militancia?, ¿cómo puede ofrecer honestidad, si continúa callado frente a la lacerante corrupción que impera en el estado”...
Por su parte, el diputado Arturo Zubía Fernández señaló que “tenemos que analizar cómo se debe de cambiar al partido. Si hay grupos, si hay gentes que estén interrumpiendo el proceso normal del PAN, creo que sí se deben de ir”.
“En estos momentos lo sano para el PAN es que la dirigencia reencauce el camino, que emprenda una nueva travesía y que regrese a sus principios”, añadió.
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