sábado, 11 de julio de 2009

Mueren padre e hija en balacera

El Diario
Chihuahua— Luego de una persecución y fuego cruzado entre grupos armados en el que se utilizaron ametralladoras antiaéreas y rifles de asalto, un padre de familia y su hija de 10 años de edad murieron al ser chocados por una camioneta tripulada por sicarios, en tanto que otra niña de 7 años se debate entre la vida y la muerte.
El enfrentamiento ocurrió en las calles Egipto y Pedernales, donde el vehículo en el que viajaban las víctimas se metió en el fuego cruzado.
Según la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), en el lugar falleció el padre de familia identificado como José Luis Ramos Galicia, de 35 años, así como Valeria Ramos, de 10 años, en tanto que la menor de 7 años fue trasladada de emergencia al Hospital Cima.
La familia afectada nada tenía que ver en la balacera, pero como la camioneta quedó en medio de la balacera fue chocada, provocándoles heridas mortales a los tripulantes; sin embargo, las balas no tocaron los cuerpos, aunque a la unidad sí, informo la Policía.
La balacera inició aproximadamente a las 14:30 horas y se escenificó desde la calle Francisco Villa y Juventud hasta las calles Egipto y Pedernales.
Según la Policía, dos grupos armados a bordo de varios vehículos, entre ellos una camioneta Expedition color dorado, blindada, y otro de una Cherokee color negro, también blindada, fueron los participantes en el enfrentamiento.
Durante el tiroteo, la camioneta Cherokee impactó en el costado derecho a la Ford Explorer negra, placas ECE9289, donde viajaba la familia integrada por Ramos Galicia y las menores Valeria y Alejandra y Ramos Manríquez de 10 y 7 años, respectivamente.
En el lugar falleció el padre de familia, quien alcanzó a salir de la camioneta, así como su hija, en tanto que la otra niña fue llevada de emergencia al hospital.
A unos 50 metros de donde quedaron los cuerpos de la familia Ramos, la Policía aseguró la camioneta Yukon, la cual presentaba varios impactos de bala.
Las autoridades informaron que se presume que los integrantes del comando de la Cherokee se llevaron al menos a dos hombres que iban en la Yukon; asimismo, se llevaron varias armas y una maleta.
La Cherokee fue encontrada abandonada una media hora después de los hechos, por las calles Defensa Popular y Educación, en la colonia Ignacio Allende.
En el lugar de la balacera la Policía aseguró casquillos calibre 50, que son de la ametralladora antiaérea conocida como Barret, de calibre .308 y de cuerno de chivo.
La balacera causó alarma entre los vecinos, así como la impresionante movilización de decenas de policías de los tres niveles de Gobierno, además de militares; sin embargo, los responsables del enfrentamiento lograron huir.

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