EL PUEBLOMarisol Valles, la ex jefa de policía del pequeño pueblo fronterizo mexicano de Praxedis G. Guerrero, en Chihuahua, negó las declaraciones del gobernador de dicho estado, quien afirmó que la joven de 21 años se aprovechó del cargo para solicitar asilo político en Estados Unidos.
Durante una entrevista con W Radio este jueves, Marisol Valles afirmó que el gobernador César Duarte miente al afirmar que ella renunció por un presunto “lío de faldas”, y afirmó que las constantes amenazas del crimen organizado la obligaron a renunciar y abandonar su pequeña comunidad.
“Hubo algunas amenazas desde el principio, no fueron seguidas, pero empezaron a subir de nivel, y eso fue lo que me asustó”, dijo la joven estudiante, quien afirmó que había alertado al alcalde de Praxedis G. Guerrero, José Luis Guerrero, así como a funcionarios del gobierno del estado.
“No me dieron ninguna protección”, afirmó la joven, tras contar a sus jefes las amenazas.
El gobernador César Duarte afirmó el pasado martes que con sus acciones Valles daña la imagen de Chihuahua y de Ciudad Juárez, y dijo que la joven “tenía un problema social en su entorno que al principio la motivaron a hacer labor social en su población. Esas acciones fueron desacreditadas por una de sus compañeras y eso la obligó a irse y aprovechar para pedir asilo político”.
“Está diciendo mentiras, hay que ver lo que ha ocurrido con los demás jefes de policía”, rebatió Valles, e hizo un recuento de todos los mandos que fueron asesinados en la región previo a que tomara protesta como jefa de la policía. “Hubo amenazas telefónicas contra los policías, yo era la secretaria y contestaba el teléfono y me daba cuenta de eso”, dijo Valles.
Valles afirmó que el día que huyó —el 1 de marzo— su madre vio coches extraños circulando cerca de la casa de la familia, y al temer lo peor, reunió a su familia y cruzó un puente peatonal hacia Estados Unidos, en donde pidió asilo.
"Vine aquí por la seguridad que mi país no puede proporcionarme", dijo Valles a CNN en una entrevista reciente. "El miedo nunca se irá. El temor que experimenté durará toda la vida". “No queremos regresar a México”, afirmó este jueves.
Valles, la estudiante idealista de Criminología, atrajo la atención internacional. Los periodistas de todo el mundo llegaron a Praxedis, un pueblo de sólo 3,000 personas, para contar la historia de la mujer que soñaba con hacer una diferencia.
“No me arrepiento”, afirmó la joven cuando se le cuestionó si se lamenta por el haber aceptado el cargo. “De lo que si uno se puede arrepentir es de que el gobierno no puede proteger a uno. Si me hubiera quedado yo ahí qué hubiera pasado conmigo. Tal vez me hubieran matado, que es lo que hubieran hecho: una placita para la mujer más valiente del mundo y no investigan quién fue, quién los asesinó”.
Un abogado de Valles afirmó que la audiencia de las autoridades estadounidenses para decidir sobre la solicitud de asilo político de la joven está programada para 2013.
Praxedis, ubicado a unos 35 kilómetros de Ciudad Juárez, se encuentra en una región que ha visto algunos de los conflictos más sangrientos, donde los cárteles rivales se pelean por las rutas de contrabando hacia Estados Unidos
Durante una entrevista con W Radio este jueves, Marisol Valles afirmó que el gobernador César Duarte miente al afirmar que ella renunció por un presunto “lío de faldas”, y afirmó que las constantes amenazas del crimen organizado la obligaron a renunciar y abandonar su pequeña comunidad.
“Hubo algunas amenazas desde el principio, no fueron seguidas, pero empezaron a subir de nivel, y eso fue lo que me asustó”, dijo la joven estudiante, quien afirmó que había alertado al alcalde de Praxedis G. Guerrero, José Luis Guerrero, así como a funcionarios del gobierno del estado.
“No me dieron ninguna protección”, afirmó la joven, tras contar a sus jefes las amenazas.
El gobernador César Duarte afirmó el pasado martes que con sus acciones Valles daña la imagen de Chihuahua y de Ciudad Juárez, y dijo que la joven “tenía un problema social en su entorno que al principio la motivaron a hacer labor social en su población. Esas acciones fueron desacreditadas por una de sus compañeras y eso la obligó a irse y aprovechar para pedir asilo político”.
“Está diciendo mentiras, hay que ver lo que ha ocurrido con los demás jefes de policía”, rebatió Valles, e hizo un recuento de todos los mandos que fueron asesinados en la región previo a que tomara protesta como jefa de la policía. “Hubo amenazas telefónicas contra los policías, yo era la secretaria y contestaba el teléfono y me daba cuenta de eso”, dijo Valles.
Valles afirmó que el día que huyó —el 1 de marzo— su madre vio coches extraños circulando cerca de la casa de la familia, y al temer lo peor, reunió a su familia y cruzó un puente peatonal hacia Estados Unidos, en donde pidió asilo.
"Vine aquí por la seguridad que mi país no puede proporcionarme", dijo Valles a CNN en una entrevista reciente. "El miedo nunca se irá. El temor que experimenté durará toda la vida". “No queremos regresar a México”, afirmó este jueves.
Valles, la estudiante idealista de Criminología, atrajo la atención internacional. Los periodistas de todo el mundo llegaron a Praxedis, un pueblo de sólo 3,000 personas, para contar la historia de la mujer que soñaba con hacer una diferencia.
“No me arrepiento”, afirmó la joven cuando se le cuestionó si se lamenta por el haber aceptado el cargo. “De lo que si uno se puede arrepentir es de que el gobierno no puede proteger a uno. Si me hubiera quedado yo ahí qué hubiera pasado conmigo. Tal vez me hubieran matado, que es lo que hubieran hecho: una placita para la mujer más valiente del mundo y no investigan quién fue, quién los asesinó”.
Un abogado de Valles afirmó que la audiencia de las autoridades estadounidenses para decidir sobre la solicitud de asilo político de la joven está programada para 2013.
Praxedis, ubicado a unos 35 kilómetros de Ciudad Juárez, se encuentra en una región que ha visto algunos de los conflictos más sangrientos, donde los cárteles rivales se pelean por las rutas de contrabando hacia Estados Unidos
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