El ex subdirector de la UBR, Fernando Oropeza en entrevista del lunes indicó que sí temía por su seguridad, al denunciar fue montaje el escándalo de bar en la Peni Vieja pero dijo "no me voy a callar".
"Ojalá realicen la investigación profesional con gente que no tenga que ver ni de mi lado ni del otro, que investiguen profesionalmente por que me mancharon mi nombre a mi me mancharon mi nombre y yo no estoy dispuesto a quedarme callad0, si hay que hablar voy hablar y hay cosas que todavía me las reservo, pero todavía hay cosas más graves en cuanto a Franco" sostuvo en entrevista el ex subdirector de la UBR antes de su ejecución.
En la entrevista, el ex subdirector primero denunció que el escándalo de la UBR fue montaje, trampa y engaño a la comunidad por parte del ahora coordinador, Luis Alfredo Franco quién lo quería sacar a como diera lugar de la Peni por venganza.
"Yo sólo autoricé las mesas de billar como esparcimiento pero el bar y armas es montaje y venganza contra mi, por parte del Luis Alfredo Franco", indicó el ex subdirector de la UBR, Fernando Oropeza.
El ex funcionario a quién le pidieron la renuncia tras el escándalo por las mesas de billar, las cervezas y armas que decomisaron en la Unidad de Bajo Riesgo "Peni Vieja", se Øpresentó el lunes frente a Palacio de Gobierno para dar su versión del cateo.
Indicó que lo del Bar lo orquestó Luis Alfredo Franco, quién desde hace meses tenía el puesto de Coordinador Operativo de Ceresos.
Expresó que la venganza de Franco es porque meses atrás introdujo al penal a cuatro de sus hombres, mismos que comenzaron a pedir dinero a custodios e internos.
Oropeza señaló que presentó quejas hasta que sacaron a los hombres de Franco de la UBR; lo que le generó conflictos.
En cuanto a las mesas de billar sostuvo que él permitió el acceso, puesto que sostuvo eran como aspecto recreativo e inclusive de deporte "son humanos". Agregó que lo de las meses de billar lo hizo de conocimiento a su superior el Eduardo Guerrero Durán, fiscal especial de ejecución y penas en el Entidad.
Empero, aseguró que el día del cateo ingresaron los federales con mochilas y luego de realizar, no encontraron las supuestas armas, hasta después que mostraron lo que decomisaron pero no dentro sino afuera del lugar.
Además también puso en tela de duda la legalidad del cateo, ya que, no lo realizaron ni con ministerios públicos, ni con derechos humanos para dar fe de la legalidad.
Sostuvo que ahora tras su renuncia a Franco lo ascendieron a Director, mismo que giró la orden de no permitir el acceso ni a Derechos Humanos, así también comentó que tras su ingreso ya piden cuota en el penal.
Finalmente, comentó él lo único que pide es que realicen la investigación a fondo por que, fue montaje para manchar su nombre y no permitirle trabajar en los penales.
A pregunta expresa de que sí temía por su seguridad, Oropeza replicó que sí temía por lo que pudiera pasar, ya que, él andaba por la calle sin arma ni escolta pese a que era militar.
"Ojalá realicen la investigación profesional con gente que no tenga que ver ni de mi lado ni del otro, que investiguen profesionalmente por que me mancharon mi nombre a mi me mancharon mi nombre y yo no estoy dispuesto a quedarme callad0, si hay que hablar voy hablar y hay cosas que todavía me las reservo, pero todavía hay cosas más graves en cuanto a Franco" sostuvo en entrevista el ex subdirector de la UBR antes de su ejecución.
En la entrevista, el ex subdirector primero denunció que el escándalo de la UBR fue montaje, trampa y engaño a la comunidad por parte del ahora coordinador, Luis Alfredo Franco quién lo quería sacar a como diera lugar de la Peni por venganza.
"Yo sólo autoricé las mesas de billar como esparcimiento pero el bar y armas es montaje y venganza contra mi, por parte del Luis Alfredo Franco", indicó el ex subdirector de la UBR, Fernando Oropeza.
El ex funcionario a quién le pidieron la renuncia tras el escándalo por las mesas de billar, las cervezas y armas que decomisaron en la Unidad de Bajo Riesgo "Peni Vieja", se Øpresentó el lunes frente a Palacio de Gobierno para dar su versión del cateo.
Indicó que lo del Bar lo orquestó Luis Alfredo Franco, quién desde hace meses tenía el puesto de Coordinador Operativo de Ceresos.
Expresó que la venganza de Franco es porque meses atrás introdujo al penal a cuatro de sus hombres, mismos que comenzaron a pedir dinero a custodios e internos.
Oropeza señaló que presentó quejas hasta que sacaron a los hombres de Franco de la UBR; lo que le generó conflictos.
En cuanto a las mesas de billar sostuvo que él permitió el acceso, puesto que sostuvo eran como aspecto recreativo e inclusive de deporte "son humanos". Agregó que lo de las meses de billar lo hizo de conocimiento a su superior el Eduardo Guerrero Durán, fiscal especial de ejecución y penas en el Entidad.
Empero, aseguró que el día del cateo ingresaron los federales con mochilas y luego de realizar, no encontraron las supuestas armas, hasta después que mostraron lo que decomisaron pero no dentro sino afuera del lugar.
Además también puso en tela de duda la legalidad del cateo, ya que, no lo realizaron ni con ministerios públicos, ni con derechos humanos para dar fe de la legalidad.
Sostuvo que ahora tras su renuncia a Franco lo ascendieron a Director, mismo que giró la orden de no permitir el acceso ni a Derechos Humanos, así también comentó que tras su ingreso ya piden cuota en el penal.
Finalmente, comentó él lo único que pide es que realicen la investigación a fondo por que, fue montaje para manchar su nombre y no permitirle trabajar en los penales.
A pregunta expresa de que sí temía por su seguridad, Oropeza replicó que sí temía por lo que pudiera pasar, ya que, él andaba por la calle sin arma ni escolta pese a que era militar.
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