José Hernández
Chihuahua, Chihuahua.- "El trabajo de la Policía Federal en la frontera es un engaño a la gente; somos muchos policías y realmente no estamos haciendo nada, tenemos presencia pero no trabajo de inteligencia, por ello los delincuentes siguen en sus casas", aseguraron agentes federales traídos al estado para combatir al narcotráfico y delincuencia organizada.Denunciaron falsas promesas de pago, corrupción de altos mandos y deficiencia armada; además de falta de capacitación, educación y adiestramiento en varios agentes y jefes principales, por lo cual la mayoría se encuentran inconformes y considerando negarse a salir a patrullar.
"La corrupción es algo que lamentablemente no se puede negar, pero también es algo que proviene directamente de los altos mandos, pues en ocasiones se captura a un delincuente y después se entrega al Ministerio Público con menos droga de la asegurada en un principio", denunció uno de los agentes de nombre Manuel.
Entre las inconformidades manifestadas por los federales está la deficiencia en el armamento, ya que tan sólo se les dan 50 balas calibre .223 (R-15) con las que se deben enfrentar a "narcotraficantes y criminales con arsenales completos de armas de alto poder".Al preguntarles sobre cuál es la respuesta de sus jefes directos, informaron que no han tenido ninguna respuesta a favor; además de que desde enero de este año no se les pagan viáticos, dinero que tiene derecho siempre que salen de la base de concentración en la Ciudad de México.
"Es una policía muy desorganizada", aseguraron los inconformes y comentaron sentirse muy comprometidos con la sociedad, pues se le está engañando con un supuesto trabajo de inteligencia criminal que no existe, pues sólo se les da la orden de patrullar sin ninguna logística.
Con un sueldo de 266 pesos por día (8 mil al mes) los agentes dijeron que en ocasiones no les alcanza ni para los gastos personales, lo que ha llevado a algunos cuantos -aclaran, no todos- a preguntarse qué hacer para cubrir los gastos, originándose la extorsión.Juan, otro de los inconformes, dijo: "La extorsión no es justificable por ningún motivo, pero es cierto que en varias ocasiones hemos escuchados a otros compañeros que dicen que van a pedir dinero a la gente para pagar los gastos propios, y esto ya es una realidad".
Comentan que muchos de los tres mil agentes en el Estado tienen ya varios meses sin ver a sus familias y casi siempre andan batallando para hablar por teléfono, pues no traen para una tarjeta de celular, bueno -aclara uno de ellos- no traemos los que trabajamos legalmente, pero algunos comandantes traen para eso y muchas cosas más.
Al tocar el tema sobre la corrupción varios de ellos coincidieron en que realmente existe, y pusieron como ejemplo que en varias ocasiones se detiene a un sospechoso y a cambio de "unos billetes" el comandante lo deja ir sin problema alguno."Somos un grupo de agentes totalmente inconformes de la situación, primero nos dicen que nos juntemos con los demás grupos policiacos y luego que sólo patrullemos.
Para intervenir en un asunto primero debemos pedir permiso a los superiores, lo que muchas veces genera que el posible delincuente se vaya"."Hace poco un joven se nos acercó y nos dijo que lo habían asaltado unos sujetos que estaban en la esquina. Nosotros pedimos autorización pero nos ordenaron que no desviáramos la ruta de patrullaje; los delincuentes se fueron y nosotros tuvimos el repudio del afectado por no ayudarlo", enfatizó Juan.
Comentaron que al incrementar las tropas federales en el país se inició con un problema de falta de adiestramiento y nivel básico de educación, por lo cual muchos de los altos mandos carecen de los conocimientos para realizar un trabajo de inteligencia, ya que sólo fueron contratados por haber estado en el Ejército; "en ocasiones existen casos de que el comandante a cargo se dedicó a la cocina militar y ahora está al mando de un grupo de policías con mayor preparación que él".
De acuerdo con la información, muchos de los agrupamientos no cuentan con capacitación ni adiestramiento, y ni siquiera se les enseñó el marco de derecho, el manejo adecuado de armas o lo relacionado con los derechos humanos, eso -aseguran- ha provocado que se cometan abusos por la misma falta de preparación.
Otro de los problemas denunciados es la corrupción administrativa, la cual es la principal causa de que no se les pague ni se les entregue lo respectivo a viáticos, dinero que debe ser utilizado para una buena estadía de los policías y no para "unos cuantos ejecutivos".
Al preguntarles sobre cuál es el motivo de su denuncia ante un medio informativo, los agentes contestaron: "Lo hacemos porque es necesario que se sepa a la luz pública la situación por la que estamos pasando muchos de nosotros que venimos a Chihuahua para ayudar con el combate contra el crimen, sin embargo, el mayor enemigo es la desorganización"La Secretaría de Gobernación informó que actualmente existen en Chihuahua entre tres mil y tres mil 300 policías federales como parte del Operativo Conjunto, de los cuales dos mil 300 están en Ciudad Juárez y el resto patrullando en otros municipios.
Inconformidades:
-No pago de viáticos
-Sueldos bajos (266 pesos por día)
-Altos mandos sin capacitación.
-Amonestaciones si atienden una denuncia ciudadana sin autorización.
-Falta de municiones; sólo 50 balas calibre .223
-Carencia de trabajo de inteligencia.
-Más de seis meses fuera de sus hogares sin poder visitar a sus familias.
-Sólo tienen, la orden de patrullar.
-Corrupción en comandantes.
-Señalamientos en su contra por la ciudadanía.
-No existe una logística de trabajo.
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