EL HERALDO
Si el trabajo que hacen las mujeres en los hogares fuera remunerado, equivaldría al 22.6% del Producto Interno Bruto, cantidad mayor a las aportaciones que hace la industria manufacturera y de petróleo, así lo indicó ayer la presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres, Paula Soto, al hacer el llamado a las mujeres para que participen en política, porque sólo así es posible incursionar en la toma de decisiones.
El trabajo que se realiza en los hogares mexicanos, y por el que no se recibe una remuneración, aumentó su valor dentro del Producto Interno Bruto (PIB) del país a 22.6% en 2009, superior al 21.7% que se reportó en 2003.
La estadística presentada por la presidenta del Inmujeres ha sido corroborada por datos aportados por el INEGI.
Y es que el valor del trabajo no remunerado de los hogares aumentó de 1,639 billones a 2,672 billones de pesos en el lapso comprendido entre 2003 y 2009, lo que representó un crecimiento de 8.5% en promedio anual.
La población que realizó el trabajo no remunerado se compone en 54.6% por mujeres y 45.4% por hombres. Las mujeres realizan en promedio anual 80.9% de las horas del trabajo no remunerado en el hogar, lo que equivale al 77.3% si se habla del valor económico equivalente.
Para revelar el ingreso monetario que obtendrían las personas que realizan dicho trabajo, el INEGI explica que cada persona generó en 2009 el equivalente a 25,400 pesos anuales por concepto de trabajo no remunerado en los hogares.
Sin embargo, cuando ese valor se desagrega, se observa que las mujeres generaron el equivalente de 37,300 pesos, mientras que la aportación de los hombres fue de 11,800 pesos durante el mismo periodo.
Incluso la proporción del valor del trabajo no remunerado de los hogares respecto al PIB en el lapso 2003-2009 es mayor a la generada por algunas actividades económicas, como la industria manufacturera que participa con 17.6%, la extracción de petróleo y gas con 6.9% o el sector agrícola que tiene una contribución del 3.4% del PIB.
La información obtenida sobre las horas destinadas al trabajo vinculado a las actividades económicas (incluyendo actividades de producción primaria) muestran que las mujeres dedican menos tiempo a la semana, con 700.6 millones de horas, en comparación con las 1,405 millones de horas trabajadas por los hombres.
Sin embargo, si se adicionan a estas horas las correspondientes al trabajo no remunerado de los hogares, la mayor participación corresponde al trabajo realizado por las mujeres, con 2,309.2 millones de horas, frente a las 1,812.6 millones de horas realizadas por los hombres.
El valor del trabajo no remunerado por tipo de actividad o función muestra que los servicios para "proporcionar cuidados y apoyo a los integrantes del hogar" son los de mayor peso económico, con una participación de 28%, o equivalente al 13.7% en horas.
Por su parte, la actividad en la que las mujeres tienen mayor aportación resultó ser la de "proporcionar alimentación", donde generan 87.7% del valor económico, seguida por las actividades de "limpieza y cuidado de la ropa y calzado", en las cuales su contribución es de 87% del total.
El trabajo que se realiza en los hogares mexicanos, y por el que no se recibe una remuneración, aumentó su valor dentro del Producto Interno Bruto (PIB) del país a 22.6% en 2009, superior al 21.7% que se reportó en 2003.
La estadística presentada por la presidenta del Inmujeres ha sido corroborada por datos aportados por el INEGI.
Y es que el valor del trabajo no remunerado de los hogares aumentó de 1,639 billones a 2,672 billones de pesos en el lapso comprendido entre 2003 y 2009, lo que representó un crecimiento de 8.5% en promedio anual.
La población que realizó el trabajo no remunerado se compone en 54.6% por mujeres y 45.4% por hombres. Las mujeres realizan en promedio anual 80.9% de las horas del trabajo no remunerado en el hogar, lo que equivale al 77.3% si se habla del valor económico equivalente.
Para revelar el ingreso monetario que obtendrían las personas que realizan dicho trabajo, el INEGI explica que cada persona generó en 2009 el equivalente a 25,400 pesos anuales por concepto de trabajo no remunerado en los hogares.
Sin embargo, cuando ese valor se desagrega, se observa que las mujeres generaron el equivalente de 37,300 pesos, mientras que la aportación de los hombres fue de 11,800 pesos durante el mismo periodo.
Incluso la proporción del valor del trabajo no remunerado de los hogares respecto al PIB en el lapso 2003-2009 es mayor a la generada por algunas actividades económicas, como la industria manufacturera que participa con 17.6%, la extracción de petróleo y gas con 6.9% o el sector agrícola que tiene una contribución del 3.4% del PIB.
La información obtenida sobre las horas destinadas al trabajo vinculado a las actividades económicas (incluyendo actividades de producción primaria) muestran que las mujeres dedican menos tiempo a la semana, con 700.6 millones de horas, en comparación con las 1,405 millones de horas trabajadas por los hombres.
Sin embargo, si se adicionan a estas horas las correspondientes al trabajo no remunerado de los hogares, la mayor participación corresponde al trabajo realizado por las mujeres, con 2,309.2 millones de horas, frente a las 1,812.6 millones de horas realizadas por los hombres.
El valor del trabajo no remunerado por tipo de actividad o función muestra que los servicios para "proporcionar cuidados y apoyo a los integrantes del hogar" son los de mayor peso económico, con una participación de 28%, o equivalente al 13.7% en horas.
Por su parte, la actividad en la que las mujeres tienen mayor aportación resultó ser la de "proporcionar alimentación", donde generan 87.7% del valor económico, seguida por las actividades de "limpieza y cuidado de la ropa y calzado", en las cuales su contribución es de 87% del total.
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