Luz del Carmen Sosa
Ciudad Juárez— La cantidad de homicidios dolosos cometidos en la ciudad y el Valle de Juárez mantiene en jaque a la Unidad Especializada en Investigación de Delitos contra la Vida (UEIDV), de la Subprocuraduría Zona Norte, ya que el grupo cuenta apenas con 20 agentes investigadores, responsables de indagar más de 2 mil crímenes, de los cuales 550 ocurrieron este año. Bajo este panorama, hay policías ministeriales que tienen a su cargo hasta 130 carpetas de investigación abiertas, por lo que arrastran un rezago "difícil de superar", sin considerar los nuevos casos que les asignen, dicen fuentes al interior de la corporación estatal.
La saturación de trabajo a la que se refieren los entrevistados, también está relacionada con la carga que implica para ellos el indagar además los homicidios imprudenciales, suicidios, muertes accidentales, abortos, homicidios en grado de tentativa, inhumaciones y exhumaciones clandestinas y las muertes de mujeres relacionadas con la delincuencia organizada, lo que merma la efectividad y celeridad en las indagatorias, aseguraron.
Las estadísticas oficiales, que mensualmente entrega la Subprocuraduría, confirman los señalamientos realizados por el personal de la dependencia, pues de las mil 89 carpetas de investigación abiertas el año pasado, únicamente 10 fueron judicializadas, lo que representa únicamente un uno por ciento del total de casos.
De esos 10 casos llevados ante un Tribunal de Garantías, uno fue judicializado en enero; 3 en febrero y una carpeta de investigación fue atraída por la PGR; 2 más en marzo y las últimos 4 expedientes fueron consignados en junio.
Para el 2009 la situación no fue mejor. Durante el primer trimestre del año se abrieron 307 carpetas de investigación por homicidios dolosos, con un total de 449 víctimas y de ese total, sólo 13 casos fueron judicializados. Es decir, que el expediente fue consignado ante un juez de Garantía para que procese al acusado o bien, para que gire la orden de aprehensión contra quien resulte responsable.
En enero, según documentos de la PGJE, 6 casos fueron judicializados; en febrero fueron 4 de los cuales 2 fueron por homicidios ocurridos en diciembre del 2008; y en marzo fueron consignados 3 expedientes.Para los investigadores, el rezago en los casos pendientes y los nuevos eventos propicia que las familias de las víctimas les pierdan confianza pues, luego de que rinden la declaración de los hechos difícilmente regresan al día siguiente.
"En ocasiones ni a las familias podemos entrevistar de manera inmediata porque en un día ocurren varios eventos y si estás en turno tienes que acudir a todos", expuso uno de los entrevistados.Lógicamente, esta situación provoca el rechazo de los deudos e incluso los han acusado de complicidad con los criminales. "Difícilmente hablan con nosotros, algunos nos han dicho 'para qué les decimos lo que sabemos, si ustedes son de los mismos', eso es muy común que nos pase”, dijo el entrevistado.
Cuestionada al respecto, la vocera de la Subprocuraduría, Daniela González Lara, aseguró que esta dependencia está trabajando con el número suficiente de elementos, “tratando de llegar a conclusiones que nos lleven a tener a los responsables ante un juez. Se sigue trabajando y va precisamente en ese sentido el esfuerzo que se realiza”, aseguró.
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