sábado, 2 de octubre de 2010

Con grandes voces pero poca audiencia, inicia “Voces del mundo para Chihuahua”

OMNIA
Con la voz de Mario Frangoulis, Olivia Gorra y Alessandro Safina, da inicio la clausura del 6to Festival Internacional Chihuahua, en el Estadio Olímpico Universitario, a donde desde las 8:00 de la noche comenzó a llegar la gente, siendo hasta ahora alrededor de 8 mil asistentes que aún no han llenado el recinto.

Primeramente hizo su aparición el oriundo de Grecia, Mario Frangoulis, cantando algunas de sus composiciones, para después dar paso a Olivia Gorra, de México, quien puso a cantar al público con algunas canciones mexicanas y el “Corrido de Chihuahua”; despúes siguió el italiano Alessandro Safina con su toque romántico y místico para el deleite de la audiencia.

Prácticamente lo único que ha sido llenado es la parte de las canchas, lugares preferenciales, especialmente por gente mayor, padres de familia, señoras, maestros, y en las gradas, que son las más vacías, la juventud se hace presente.

Hasta el momento el ambiento es tranquilo, aunque los dos tenores han cantado con emotividad; sólo la mexicana animó un poco al público que se encuentra en la espera del turno de la francesa Emma Shapplin.Con la voz de Mario Frangoulis, Olivia Gorra y Alessandro Safina, da inicio la clausura del 6to Festival Internacional Chihuahua, en el Estadio Olímpico Universitario, a donde desde las 8:00 de la noche comenzó a llegar la gente, siendo hasta ahora alrededor de 8 mil asistentes que aún no han llenado el recinto.

Primeramente hizo su aparición el oriundo de Grecia, Mario Frangoulis, cantando algunas de sus composiciones, para después dar paso a Olivia Gorra, de México, quien puso a cantar al público con algunas canciones mexicanas y el “Corrido de Chihuahua”; despúes siguió el italiano Alessandro Safina con su toque romántico y místico para el deleite de la audiencia.

Prácticamente lo único que ha sido llenado es la parte de las canchas, lugares preferenciales, especialmente por gente mayor, padres de familia, señoras, maestros, y en las gradas, que son las más vacías, la juventud se hace presente.

Hasta el momento el ambiento es tranquilo, aunque los dos tenores han cantado con emotividad; sólo la mexicana animó un poco al público que se encuentra en la espera del turno de la francesa Emma Shapplin.

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