OMNIAFrente a más de 90 mil personas reunidas en el Zócalo capitalino, las activistas Olga Reyes y Patricia Duarte, leyeron los nombres de las personas que perdieron la vida en la lucha contra el crimen organizado.
Entre las principales exigencias al Gobierno Federal –para detener la escalada de violencia y regenerar el tejido social y comunitario- se pide esclarecer desapariciones y asesinatos, así como una resolución pública en un plazo de tres meses a autores intelectuales y materiales.
Las activistas Patricia Duarte y Olga Reyes leen el pacto Por un México en paz, con justicia y seguridad, así como la resolución en un plazo de tres meses de los autores materiales e intelectuales de los casos emblemáticos como los de la familia Reyes, Marisela Escobedo y su hija Rubí, Susana Chávez los niños de la guardería ABC, Benjamín LeBarón, Luis Weckman, los jóvenes de Villas de Salvárcar, que fueron nombrados todos, ahora en la Ciudad de México, mientras todos los presentes contestaban “no debió morir”.
Entre las principales exigencias al Gobierno Federal –para detener la escalada de violencia y regenerar el tejido social y comunitario- se pide esclarecer desapariciones y asesinatos, así como una resolución pública en un plazo de tres meses a autores intelectuales y materiales.
Las activistas Patricia Duarte y Olga Reyes leen el pacto Por un México en paz, con justicia y seguridad, así como la resolución en un plazo de tres meses de los autores materiales e intelectuales de los casos emblemáticos como los de la familia Reyes, Marisela Escobedo y su hija Rubí, Susana Chávez los niños de la guardería ABC, Benjamín LeBarón, Luis Weckman, los jóvenes de Villas de Salvárcar, que fueron nombrados todos, ahora en la Ciudad de México, mientras todos los presentes contestaban “no debió morir”.
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