EL HERALDOCierra Tribunal procedimiento en su contra.
Chihuahua, Chihuahua.- Catalina Ochoa, Rafael Boudib y Netzahualcóyotl Zúñiga renunciaron a sus cargos como jueces del Tribunal Oral del Distrito Bravos, dejando sin efecto el procedimiento administrativo abierto en su contra para investigar su responsabilidad en torno a la liberación del imputado por el homicidio de la joven Rubí Frayre Escobedo.
Informó el Supremo Tribunal de Justicia de Estado que los magistrados presentaron la semana pasada su renuncia con un carácter de irrevocable tras haber permanecido un periodo de tres meses inhabilitados y sin goce de sueldo para desempeñar sus labores como funcionarios de primera instancia del Poder Judicial.
Indicó que el pasado viernes se acordó aceptar la renuncia por un Acuerdo de Tribunal que apenas ayer comenzó a tener los efectos de carácter legal perseguidos por parte de los resolutores de la causa penal 669/09, abierta para el esclarecimiento de la muerte de la hija de Marisela Escobedo.
"El Poder Judicial, por medio de la Presidencia, confirmó que la renuncia de los jueces fue aceptada mediante un acuerdo del tribunal dictado el pasado viernes, mismo que quedó publicado y causó efectos...", señaló el Supremo Tribunal de Justicia de Estado.
La renuncia ocurre a tres semanas de realizarse la audiencia constitucional que se tiene prevista para resolver la demanda de amparo que presentaron los jueces ante los tribunales federales con el objetivo de controvertir la queja que se interpuso en su contra por parte de la Fiscalía General del Estado.
Esto último tras haber ofrecido una suspensión definitiva para que el procedimiento no pudiera resolverse en contra de los jueces, quienes alegaron violaciones a sus garantías individuales por parte del Poder Judicial, al haber aprobado por unanimidad el inicio de una investigación, bajo el argumento de que: "Los jueces no valoraron todos los elementos presentados por el Ministerio Público".
De ahí que se encontraran argumentos para abrir la investigación en torno a los funcionarios señalados por parte del fiscal Carlos Manuel Salas.
Se indicó que con la renuncia de los jueces quedó sin materia la citada investigación que resolvería el magistrado Javier Ramírez Benítez, una vez que cesaran los efectos de la suspensión definitiva otorgada por parte del juzgado federal.
Maclovio Murillo, abogado defensor de los magistrados del Tribunal de Juicio Oral del Distrito Bravos, omitió cualquier comentario en torno a la renuncia.
Chihuahua, Chihuahua.- Catalina Ochoa, Rafael Boudib y Netzahualcóyotl Zúñiga renunciaron a sus cargos como jueces del Tribunal Oral del Distrito Bravos, dejando sin efecto el procedimiento administrativo abierto en su contra para investigar su responsabilidad en torno a la liberación del imputado por el homicidio de la joven Rubí Frayre Escobedo.
Informó el Supremo Tribunal de Justicia de Estado que los magistrados presentaron la semana pasada su renuncia con un carácter de irrevocable tras haber permanecido un periodo de tres meses inhabilitados y sin goce de sueldo para desempeñar sus labores como funcionarios de primera instancia del Poder Judicial.
Indicó que el pasado viernes se acordó aceptar la renuncia por un Acuerdo de Tribunal que apenas ayer comenzó a tener los efectos de carácter legal perseguidos por parte de los resolutores de la causa penal 669/09, abierta para el esclarecimiento de la muerte de la hija de Marisela Escobedo.
"El Poder Judicial, por medio de la Presidencia, confirmó que la renuncia de los jueces fue aceptada mediante un acuerdo del tribunal dictado el pasado viernes, mismo que quedó publicado y causó efectos...", señaló el Supremo Tribunal de Justicia de Estado.
La renuncia ocurre a tres semanas de realizarse la audiencia constitucional que se tiene prevista para resolver la demanda de amparo que presentaron los jueces ante los tribunales federales con el objetivo de controvertir la queja que se interpuso en su contra por parte de la Fiscalía General del Estado.
Esto último tras haber ofrecido una suspensión definitiva para que el procedimiento no pudiera resolverse en contra de los jueces, quienes alegaron violaciones a sus garantías individuales por parte del Poder Judicial, al haber aprobado por unanimidad el inicio de una investigación, bajo el argumento de que: "Los jueces no valoraron todos los elementos presentados por el Ministerio Público".
De ahí que se encontraran argumentos para abrir la investigación en torno a los funcionarios señalados por parte del fiscal Carlos Manuel Salas.
Se indicó que con la renuncia de los jueces quedó sin materia la citada investigación que resolvería el magistrado Javier Ramírez Benítez, una vez que cesaran los efectos de la suspensión definitiva otorgada por parte del juzgado federal.
Maclovio Murillo, abogado defensor de los magistrados del Tribunal de Juicio Oral del Distrito Bravos, omitió cualquier comentario en torno a la renuncia.
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