Como una reacción positiva, aunque tardía, calificaron criminólogos y abogados la acción emprendida por el gobierno para enfrentar a los extorsionadores a través de un grupo de choque que enfrente a los delincuentes.
Este tipo de estrategias ya había sido solicitada por la población que es víctima de la delincuencia, pero es necesario que antes de la fuerza, el Estado utilice la inteligencia para enfrentar a los criminales organizados, dijeron.
“Creo que es positivo, se habían tardado, porque la policía ya tenía información acerca de que los delincuentes regresaban a los lugares en los que atacaban y no hacía nada”, consideró el presidente de la Barra y Colegio de Abogados de Ciudad Juárez, Héctor González Mocken.
Agregó que la gente desconfía, se pregunta qué es lo que pasa ante la pasividad de las autoridades, dice que había complicidad porque la están extorsionando e incluso amenazando con regresar, pero se cuestiona qué es lo que ocurre con la policía porque no la protege.
La nueva estrategia, indicó, habla de reacción en ese sentido, de que estarán pendientes que las amenazas no sean cumplidas a través de estas medidas que está instrumentando la policía, siempre y cuando no se abuse de estas porque incurrir en errores involucrará a personas que no tienen nada que ver con ese tipo de asuntos.
Consideró también que deben trabajar en estos procesos policías preparados, respetuosos de las garantías individuales y debidamente adiestrados para reaccionar en caso de que se presenten estas personas a cumplir con sus amenazas.
“Desde luego que la recomendación es que fuera una estrategia permanente en atención, no sólo a los corporativos que tienen recursos, sino que atiendan al ciudadano común y corriente que se ha recibido amenazas de extorsión”, señaló.
Especificó que los criminales han afectado tanto a la gente que tiene recursos económicos como a las que no los posee, por lo que la autoridad debe atender las quejas provengan de quien sea.
Por su parte el criminólogo, Oscar Máynez Grijalva, consideró que lo que la policía está diciendo a los criminales con esta actividad es que creó un grupo duro de reacción y que van con todo.
“Estos grupos que estarán al tú por tú con los delincuentes, ya estaban siendo demandados por la sociedad”, dijo.
Sin embargo, el profesionista indicó que la autoridad debe ponerse a trabajar en actividades de inteligencia que le permita identificar, ubicar y detener a las personas que están extorsionando a los juarenses.
“Si hay agresión por parte de los delincuentes, la policía debe repelerla con toda la fuerza, nadie le está diciendo que no use la fuerza que le corresponde y que por ley está autorizada a usarla”, mencionó.
Aunque la información sobre el tema no es oficial, ya que fue dada a conocer por fuentes no autorizadas por el gobierno, no quiso dar una opinión acerca del operativo en sí, pero reiteró que antes de usar la fuerza debe usarse la inteligencia.
Dijo que a través de ese rubro pueden establecer los organigramas que tienen los criminales, su forma de trabajar y anticiparse a la actividad delicuencial.
“Los criminales advierten lo que harán por teléfono, partiendo de eso hace falta inteligencia, ya con esto se puede hacer uso de la fuerza pero de una forma más quirúrgica, pegar donde se debe, minimizando que haya victimas inocentes”, declaró.
El criminólogo manifestó que la medida puede ser extemporánea, ya que las autoridades se han tardado para dar una respuesta contundente a lo que está sufriendo la población.
“Tienen dos años de retraso, pero el monopolio de la fuerza es del Estado, es el que tiene derecho de usarla y la sociedad debe aceptarlo, pero antes deben existir acciones de inteligencia”, reiteró.
Confían empresarios sea efectivo
Los dueños de negocios confían que el nuevo grupo de policías y militares que integran el comando contra extorsionadores logre frenar este tipo de ilícitos y castigar a los delincuentes, señalaron integrantes del Consejo Coordinador Empresarial de Ciudad Juárez.
“El sector empresarial ve con buenos ojos que por fin las autoridades de seguridad pública hayan decidido coordinarse para atacar de manera muy especial al grave problema que han creado los que se dedican a la extorsión a través del cobro forzado de cuotas a empresas y personas”, declaró Federico Ziga Martínez, presidente de Canirac.
Reconoció que si bien la medida llega tarde porque el problema de los extorsionadores empezó a cobrar auge desde hace dos años, a tal grado que en la actualidad llega a niveles de escándalo en el sector empresarial, ojalá que haya efectividad rápida de las autoridades a favor de la ciudadanía juarense.
El dirigente del sector gastronómico dijo que muchos negocios de todos los giros se han tenido que someter al pago obligado de “cuotas” de los delincuentes por miedo a perder la vida y ver sus negocios reducidos a cenizas, entre otras afectaciones.
Agregó que otros empresarios como medida de precaución cerraron sus establecimientos de manera temporal o simplemente los reubicaron a la vecina ciudad de El Paso, pues aquí ya les resultó intolerable la ola de violencia y el cobro de protección que exige los hampones.
Ziga Martínez mencionó que son incalculables las pérdidas económicas que han sufrido los empresarios por el secuestro y las extorsiones que han sido objeto en los últimos 24 meses.
El presidente de Canirac consideró que si el comando armado puesto en marcha por de tres niveles de gobierno logra tener éxito contra los extorsionadores, entonces después el reto será lograr que vuelvan las inversiones que se fueron por cuestión de la inseguridad pública.
A su vez Guillermo Soria Magaña, director de la Cámara Nacional de Comercio, manifestó que ojalá que el nuevo comando armado de policías y militares tenga éxito y de esta forma se detenga y castigue a los delincuentes conforme lo marca la ley.
“Los empresarios tenemos esperanza de que este comando encubierto aplique las estrategias adecuadas para poner tras las rejas a los que se dedican a obtener dinero fácil a través de las extorsiones y secuestros”, afirmó.
Indicó que las extorsiones empezaron como un delito aislado y después se generalizó hasta volverse intolerable para todos los habitantes de Ciudad Juárez, en especial para el sector empresarial.
Este fin de semana trascendió que un grupo de policías y militares comenzó a operar en forma encubierta para tratar de frenar las extorsiones y secuestros que afectan a ciudadanos, profesionistas y empresarios.
Sus órdenes son proteger a los negocios amenazados, enfrentar con armas automáticas a los incendiarios y hacer lo posible por detenerlos.
Los miembros del cuerpo especial actúan simultáneamente en diferentes lugares a la vez, utilizan armamento automático y está formado por elementos de los tres niveles de Gobierno, entre ellos policías municipales adiestrados en Santa Gertrudis.
Asimismo se cuenta con la participación de militares del grupo de fusileros paracaidistas, comúnmente denominados boinas rojas, que se encuentra en la ciudad, dijeron fuentes consultadas.
Este tipo de estrategias ya había sido solicitada por la población que es víctima de la delincuencia, pero es necesario que antes de la fuerza, el Estado utilice la inteligencia para enfrentar a los criminales organizados, dijeron.
“Creo que es positivo, se habían tardado, porque la policía ya tenía información acerca de que los delincuentes regresaban a los lugares en los que atacaban y no hacía nada”, consideró el presidente de la Barra y Colegio de Abogados de Ciudad Juárez, Héctor González Mocken.
Agregó que la gente desconfía, se pregunta qué es lo que pasa ante la pasividad de las autoridades, dice que había complicidad porque la están extorsionando e incluso amenazando con regresar, pero se cuestiona qué es lo que ocurre con la policía porque no la protege.
La nueva estrategia, indicó, habla de reacción en ese sentido, de que estarán pendientes que las amenazas no sean cumplidas a través de estas medidas que está instrumentando la policía, siempre y cuando no se abuse de estas porque incurrir en errores involucrará a personas que no tienen nada que ver con ese tipo de asuntos.
Consideró también que deben trabajar en estos procesos policías preparados, respetuosos de las garantías individuales y debidamente adiestrados para reaccionar en caso de que se presenten estas personas a cumplir con sus amenazas.
“Desde luego que la recomendación es que fuera una estrategia permanente en atención, no sólo a los corporativos que tienen recursos, sino que atiendan al ciudadano común y corriente que se ha recibido amenazas de extorsión”, señaló.
Especificó que los criminales han afectado tanto a la gente que tiene recursos económicos como a las que no los posee, por lo que la autoridad debe atender las quejas provengan de quien sea.
Por su parte el criminólogo, Oscar Máynez Grijalva, consideró que lo que la policía está diciendo a los criminales con esta actividad es que creó un grupo duro de reacción y que van con todo.
“Estos grupos que estarán al tú por tú con los delincuentes, ya estaban siendo demandados por la sociedad”, dijo.
Sin embargo, el profesionista indicó que la autoridad debe ponerse a trabajar en actividades de inteligencia que le permita identificar, ubicar y detener a las personas que están extorsionando a los juarenses.
“Si hay agresión por parte de los delincuentes, la policía debe repelerla con toda la fuerza, nadie le está diciendo que no use la fuerza que le corresponde y que por ley está autorizada a usarla”, mencionó.
Aunque la información sobre el tema no es oficial, ya que fue dada a conocer por fuentes no autorizadas por el gobierno, no quiso dar una opinión acerca del operativo en sí, pero reiteró que antes de usar la fuerza debe usarse la inteligencia.
Dijo que a través de ese rubro pueden establecer los organigramas que tienen los criminales, su forma de trabajar y anticiparse a la actividad delicuencial.
“Los criminales advierten lo que harán por teléfono, partiendo de eso hace falta inteligencia, ya con esto se puede hacer uso de la fuerza pero de una forma más quirúrgica, pegar donde se debe, minimizando que haya victimas inocentes”, declaró.
El criminólogo manifestó que la medida puede ser extemporánea, ya que las autoridades se han tardado para dar una respuesta contundente a lo que está sufriendo la población.
“Tienen dos años de retraso, pero el monopolio de la fuerza es del Estado, es el que tiene derecho de usarla y la sociedad debe aceptarlo, pero antes deben existir acciones de inteligencia”, reiteró.
Confían empresarios sea efectivo
Los dueños de negocios confían que el nuevo grupo de policías y militares que integran el comando contra extorsionadores logre frenar este tipo de ilícitos y castigar a los delincuentes, señalaron integrantes del Consejo Coordinador Empresarial de Ciudad Juárez.
“El sector empresarial ve con buenos ojos que por fin las autoridades de seguridad pública hayan decidido coordinarse para atacar de manera muy especial al grave problema que han creado los que se dedican a la extorsión a través del cobro forzado de cuotas a empresas y personas”, declaró Federico Ziga Martínez, presidente de Canirac.
Reconoció que si bien la medida llega tarde porque el problema de los extorsionadores empezó a cobrar auge desde hace dos años, a tal grado que en la actualidad llega a niveles de escándalo en el sector empresarial, ojalá que haya efectividad rápida de las autoridades a favor de la ciudadanía juarense.
El dirigente del sector gastronómico dijo que muchos negocios de todos los giros se han tenido que someter al pago obligado de “cuotas” de los delincuentes por miedo a perder la vida y ver sus negocios reducidos a cenizas, entre otras afectaciones.
Agregó que otros empresarios como medida de precaución cerraron sus establecimientos de manera temporal o simplemente los reubicaron a la vecina ciudad de El Paso, pues aquí ya les resultó intolerable la ola de violencia y el cobro de protección que exige los hampones.
Ziga Martínez mencionó que son incalculables las pérdidas económicas que han sufrido los empresarios por el secuestro y las extorsiones que han sido objeto en los últimos 24 meses.
El presidente de Canirac consideró que si el comando armado puesto en marcha por de tres niveles de gobierno logra tener éxito contra los extorsionadores, entonces después el reto será lograr que vuelvan las inversiones que se fueron por cuestión de la inseguridad pública.
A su vez Guillermo Soria Magaña, director de la Cámara Nacional de Comercio, manifestó que ojalá que el nuevo comando armado de policías y militares tenga éxito y de esta forma se detenga y castigue a los delincuentes conforme lo marca la ley.
“Los empresarios tenemos esperanza de que este comando encubierto aplique las estrategias adecuadas para poner tras las rejas a los que se dedican a obtener dinero fácil a través de las extorsiones y secuestros”, afirmó.
Indicó que las extorsiones empezaron como un delito aislado y después se generalizó hasta volverse intolerable para todos los habitantes de Ciudad Juárez, en especial para el sector empresarial.
Este fin de semana trascendió que un grupo de policías y militares comenzó a operar en forma encubierta para tratar de frenar las extorsiones y secuestros que afectan a ciudadanos, profesionistas y empresarios.
Sus órdenes son proteger a los negocios amenazados, enfrentar con armas automáticas a los incendiarios y hacer lo posible por detenerlos.
Los miembros del cuerpo especial actúan simultáneamente en diferentes lugares a la vez, utilizan armamento automático y está formado por elementos de los tres niveles de Gobierno, entre ellos policías municipales adiestrados en Santa Gertrudis.
Asimismo se cuenta con la participación de militares del grupo de fusileros paracaidistas, comúnmente denominados boinas rojas, que se encuentra en la ciudad, dijeron fuentes consultadas.
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