Chihuahua, Chihuahua.- Las internas de la Unidad de Bajo Riego en esta ciudad disfrutaron del mejor regalo de Navidad. Sus hijos menores de doce años ingresaron a la Penitenciaría para pasar con ellas todo el fin de semana.
En total fueron 14 niños quienes desde el 24 de diciembre, en Nochebuena, pudieron entrar con sus madres para cenar, dormir y celebrar con ellas estas fiestas especiales. Las internas que disfrutaron de la compañía de sus hijos fueron diez, aunque la totalidad de los habitantes de la UBR disfrutaron de la visita especial que se les permitió con motivo de la Navidad.
Por tal motivo los patios y celdas de la conocida como "Peni vieja" estuvieron llenos de colores y olores por las diferentes prendas de vestir de los asistentes y los alimentos que cada familia preparó para celebrar con su interno o interna su Navidad.
En Nochebuena las internas se organizaron para, junto con los niños que ingresaron, preparar una cena especial. Unas llevaron el pavo, otras el relleno y unas más el espaguetti o el puré de papa. Y a la hora de dormir los niños se acomodaron con sus madres en las literas de sus dormitorios para compartir una noche llena de pláticas, juegos y alegría, pues dormir con sus hijos y sentirlos tan cerca para estas mujeres es algo anhelado.
Ya ayer 25, las madres e hijos recibieron en su patio al resto de sus familiares, quienes tuvieron la posibilidad de compartir la mañana y parte de la tarde. Los niños que ingresaron participaron también de una posada, en la que quebraron piñatas y recibieron sus "aguinaldos", las famosas bolsitas con dulces para celebrar la fecha.
Los pequeños permanecerán con sus madres dentro de la Unidad de Bajo Riesgo hasta mañana domingo, gracias a que se atravesó el fin de semana, y será el día de visita cuando los pequeños puedan marcharse con los familiares.
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