Chihuahua, Chihuahua.- Mientras trataba de realizar su trabajo, un fotógrafo de El Heraldo de Chihuahua, fue agredido por varios sujetos al tratar de evitar que tomara fotografías de un hombre ejecutado en las calles de la colonia Obrera, sin que la Policía Municipal, que estaba presente interviniera.
Los hechos ocurrieron a las 2:30 horas, cuando los reporteros acudían al reporte de un hombre asesinado en la avenida Juárez, entre 39 y Colón, debido a que varios sujetos habían arremetido a balazos contra él.
El fotógrafo Sergio Hernández, de El Heraldo de Chihuahua, en compañía con compañeros de otros medios de comunicación, comenzaron a hacer su trabajo tomando las fotos del hecho, pues en el lugar había perdido la vida un hombre identificado como José Ángel Rodríguez Carvajal.
En el lugar de los hechos se reunieron familiares y amigos del fallecido, quienes comenzaron a gritar a los reporteros que respetaran el dolor ajeno, mas debido a su labor, Sergio Hernández comenzó a realizar su trabajo, tomando los aspectos de la movilización.
Mientras estaba tomando una de las gráficas, uno de los familiares o amigos del fallecido se acercó hacia él y sin mediar palabra alguna lo golpeó del lado derecho del rostro, por lo que Sergio cayó al suelo y su cámara también.
Ya con el fotógrafo en el suelo, el hombre comenzó a patearlo y en uno de los golpes le dio a la cámara, que salió disparada a unos diez metros del lugar. Cabe destacar que en el lugar se encontraban elementos de la Policía Municipal, quienes a pesar de ser testigos de las agresiones hacia el reportero no acudieron a socorrerlo.
"Para que se te quite", fue lo último que Sergio escuchó decir al hombre que lo golpeaba, quien después se retiró del lugar y se confundió entre los curiosos que ahí se encontraban, sin que nadie hiciera algo por detenerlo.A pesar de los golpes que recibió, Sergio se levantó y primero que nada se puso a buscar su herramienta de trabajo, su cámara, la cual localizó a varios metros de donde fue agredido.
Los reporteros terminaron de levantar los datos de lo ocurrido y se retiraron del lugar, pero Sergio ya llevaba varias lesiones en el rostro y el cuerpo y también su cámara, con un valor de 8 mil pesos aproximadamente, destrozada, totalmente inservible.
Al acudir a revisión médica en el Instituto Mexicano del Seguro Social, luego de las radiografías, se dio cuenta de que los golpes le habían desviado el tabique, por lo que acudió a presentar su denuncia ante la Procuraduría General de Justicia del Estado, donde luego de trámites burocráticos, logró imponerla, por el delito de daños y lesiones.
Ahora, aunque sabe que ninguna persona será castigada por los daños, sólo espera encontrar una nueva cámara para poder realizar su trabajo y de nuevo enfrentarse a los riesgos de su labor.Y es que Sergio sabe que ninguna persona responderá por los daños, aunque levantó la denuncia, debido a que las autoridades presentes ni siquiera levantaron un reporte preministerial de lo ocurrido, a pesar, de que sólo se encontraban a unos metros del lugar.
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