Chihuahua, Chihuahua.- Un individuo al que el Operativo Conjunto Chihuahua había acusado en septiembre del año pasado de participar en 25 ataques que cobraron la vida de 33 personas, fue sobreseído del último expediente que se le había iniciado por el fuero común.
Juan Gerardo Hernández del Real, alias "el Moreno", de 24 años, fue arrestado el 1 de septiembre del año pasado en posesión de un revólver .38 Especial y 10 gramos de cocaína, y al ser presentado ante los medios de comunicación las instancias aseguraron que había confesado haber participado en dichos ataques, sin embargo se comprobó que no tuvo intervención alguna.
Hernández del Real fue puesto a disposición del agente del Ministerio Público de la Federación de la Delegación Estatal de la PGR, que inició la investigación respectiva, luego de que supuestamente había "confesado" ser integrante del "La Línea", brazo armado del cártel de Juárez.
Además se dijo que había aceptado pertenecer a un grupo de sicarios que actúan en el Distrito Babícora de Ciudad Juárez, y entre los homicidios que se dijo cometió se encuentran el ataque en la colonia Infonavit Nuevo, así como en el homicidio de Alejandro Aranda Valdiviezo, de 36 años, capitán segundo intendente del 20 Regimiento de la Guarnición Militar, en agosto, en el interior del billar Bol-Bol.
En este último caso, ocho días después de la aprehensión, un juez de Garantías se declaró incompetente para juzgarlo a él y a las otras personas que habían sido acusadas del homicidio del militar, por lo que transfirió el expediente a la Procuraduría General de la República.
De cualquier forma, Hernández del Real no ha quedado en libertad, pues un juez federal determinó un proceso penal por delitos contra la salud por posesión de cocaína con fines de comercio, así como por violación a la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos al portar arma de fuego sin licencia, motivo por el que había sido arrestado originalmente.
El sobreseimiento se trata de una sentencia absolutoria, toda vez que la acción de la justicia queda extinguida y el estado no podrá volver a acusarlo por los mismos hechos, aunque todavía sigue en prisión procesado por los delitos federales antes señalados.
Un expediente es sobreseído cuando el indiciado no cometió el hecho por el que fue acusado, se comprobó claramente su inocencia, se le exenta de responsabilidad penal o no hay los elementos suficientes como para fundar una acusación, entre otros.
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