Autoridades de Estados Unidos y México localizaron un “narcotúnel” de una extensión de 64 metros construido debajo del lecho encementado del río Bravo, a escasos metros del puente internacional Córdova de las Américas.Según agentes federales, el túnel que es el primero que se descubre en esta frontera, ya tenía al menos un par de meses de haber sido construido y siendo utilizado para el tráfico de drogas y armas. Sin embargo, no pudieron determinar qué cantidades de ambas cosas se lograron cruzar de un país a otro.La entrada a esa estructura del lado mexicano inicia en una alcantarilla en los patios fiscales de la Aduana Fronteriza, pero tiene un acceso en la acera sur de la Prolongación Juan Pablo II, que recientemente construyó el Gobierno del Estado, y otra más en el lado norte que desemboca en el Bravo.El túnel sigue su ruta debajo del lecho encementado del río y sale en el interior del drenaje pluvial de El Paso, que también desemboca en el Bravo, indicaron agentes y peritos investigadores de la Procuraduría General de la República (PGR) que se introdujeron en la construcción.“Fue realizado rudimentariamente, rompieron el cemento dentro de la alcantarilla y cavaron debajo de la loza que cubre el lecho del río. Quien lo hizo conoce algo de esto aunque lo hizo rudimentariamente”, dijo un agente de la PGR que participó en las investigaciones.Señaló que se indagará la posible conexión que tenga con los patios fiscales de donde proviene la alcantarilla que fue usada como entrada.“Es posible, vamos a investigarlo, ahorita no podemos informar nada”, dijo el funcionario federal.El hallazgo del túnel se dio luego de que las autoridades estadounidenses detectaron durante las primeras horas de ayer movimiento de personas a escasos metros de la parte inferior del Puente Libre, donde un grupo de al menos cinco personas levantó una de las rejillas del drenaje pluvial de El Paso, que desemboca en el río.En el lugar aparentemente fue detenido un menor de edad, el cual se localizó a la entrada del túnel, así como aproximadamente 100 kilos de mariguana en paquetes rectangulares.El hallazgo movilizó a más de un centenar de agentes de ambos países, pero fueron peritos de la PGR quienes comprobaron la existencia del pasadizo, después de que al mediodía se introdujeron del lado mexicano y salieron del lado estadounidense.El túnel, de acuerdo con los elementos de la PGR, tiene una longitud de 64 metros y un diámetro de aproximadamente 40 centímetros. Conduce al drenaje pluvial de El Paso, a través del cual los narcotraficantes fácilmente se internaban a esa ciudad sin ser detectados.Lo estrecho del pasadizo obligó a los peritos, dos de ellos mujeres, a recorrerlo reptando en un tiempo de aproximadamente 20 minutos, en los que por momentos se perdió la comunicación y provocó la alarma de sus compañeros por temor a que el pasadizo se hubiera derrumbado.Además de la droga, en el lugar se localizó una mochila con ropa y del lado mexicano vasos desechables de café de una franquicia internacional y al menos seis costales vacíos.Según personal de la PGR, corresponderá a la Comisión Internacional de Limites y Aguas (CILA) determinar la destrucción del túnel, una vez que se concluyan sus indagatorias.De acuerdo con datos periodísticos, el lecho del Bravo fue encementado después de la devolución de El Chamizal a México en el año de 1967, después de que poco más de un siglo atrás una crecida movió el cauce del río y generó un conflicto diplomático.Uno de los puntos de la Convención del Chamizal que resolvió la disputa, fue construir un canal artificial para prevenir que en el futuro el río Bravo volviera a cambiar la frontera internacional. El canal fue construido en concreto con 51 metros de ancho en la parte superior y 4.6 metros de profundidad. Debajo de ese canal, narcotraficantes construyeron el túnel que ayer fue descubierto por autoridades de ambos países.
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